Investigadores en Singapur han desarrollado un adhesivo basado en el campo magnético que promete abaratar costos, ahorrar energía y reducir el espacio de almacenamiento.
El avance de los científicos de la Universidad Tecnológica de Nanyang (NTU Singapur) es visto como una alternativa a los pegamentos convencionales, ya que podría ser usado en una amplia gama de campos.
El pegamento podría ser usado en equipos deportivos de alta gama, productos automotrices, electrónica, energía, procesos de fabricación aeroespacial y médica, según reporta SciTech Daily.
Las pruebas de laboratorio, publicadas en la revista científica Applied Materials Today, han demostrado que el adhesivo tiene una resistencia de hasta 7 megapascales, a la par con muchos de los adhesivos basados en la popular resina epoxi.
¿Cuál es la diferencia?
La técnica desarrollada por los investigadores asiáticos utiliza el campo magnético para unir materiales como plástico, cerámica o madera, a diferencia de la humedad, calor o luz de los adhesivos tradicionales.
La forma tradicional requiere de un proceso de curado para unir el pegamento entre las dos superficies, a medida que el pegamento se cristaliza y endurece para alcanzar su resistencia final.
A menudo se requieren temperaturas de curado específicas, que incluso pueden llegar a los 80° Celsius.
El pegamento de “curado magnético” puede hacer el proceso a través de un campo magnético.
¿Cuáles la ventaja?
El profesor Terry Steele, de la Escuela de Ciencia e Ingeniería de Materiales de la NTU, explicó que el desarrollo es una manera de curar los adhesivos en cuestión de minutos después de la exposición a un campo magnético.
“Esto evita el sobrecalentamiento de las superficies a las que se aplican. Esto es importante ya que algunas superficies que queremos unir son extremadamente sensibles al calor, como la electrónica flexible y los plásticos biodegradables”, apuntó.
Además, también podría ser útil en condiciones ambientales donde los adhesivos actuales no funcionan bien, como materiales aislantes donde los activadores tradicionales, como el calor, la luz y el aire, no pueden alcanzar fácilmente el adhesivo.
El adhesivo de “curado magnético” se fabrica combinando un adhesivo epoxi típico disponible en el mercado con nanopartículas magnéticas especialmente diseñadas por los científicos de NTU.
Sin embargo, no es necesario mezclarlo con ningún endurecedor o acelerador, a diferencia de los adhesivos de dos componentes, lo que facilita su fabricación y aplicación.