Calificado como el hallazgo más importante realizado en Egipto en 2020 —el año de la crisis sanitaria internacional—, la última campaña de excavaciones ha descubierto un total de 59 sarcófagos intactos en la antigua necrópolis egipcia de Saqqara, al sur de El Cairo.
El conjunto de sarcófagos de madera —que data de la dinastía XXVI— cuenta con distintos estilos y tamaños, y le corresponde a sacerdotes, estadistas de alto rango y altos funcionarios, de acuerdo con el examen preliminar.
«Es un hallazgo realmente importante porque se encuentra a la sombra de la pirámide escalonada (Zoser), cerca de las tumbas de un conocido embajador que firmó el tratado de Ramsés II con los hititas, de la niñera de Tutankamón y de un primer ministro de Amenhotep III», declaró el exministro de Antigüedades de Egipto, Zahi Hawass, a El Mundo.
Se trata también de un trabajo llevado a cabo íntegramente por investigadores egipcios —que iniciaron su campaña en agosto pasado— y del primer anuncio arqueológico desde el inicio de la emergencia sanitaria provocada por el nuevo coronavirus.
“Creíamos que solo había momias de animales, como gatos, cocodrilos, serpientes y leones”, refirió Mustafá Waziri, secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades de Egipto, a Arab News.
Esta vez, la expedición local también encontró diversas estatuas del dios funerario Ptah-Sokar-Osiris, aunque la estelar es una representación en bronce de 35 centímetros de Nefertum, un dios del panteón egipcio vinculado al nacimiento del sol.
El destino de los 59 sarcófagos y ataúdes es ser exhibidos en el Gran Museo Egipcio, cuya apertura está fechada para 2021.