Un equipo de científicos internacionales concluyó un estudio que se extendió por más de una década y que tenía por objetivo someter a prueba la teoría de la relatividad postulada por Albert Einstein en 1916. Los resultados, publicados en la revista científica Physical Review X, confirman que, a más de 100 años de su publicación, los postulados de Einstein permanecen vigentes e incólumes.
El estudio fue dirigido por científicos del Instituto Max Planck de Radioastronomía en Alemania y, según explicaron en un comunicado, formó parte de un esfuerzo por someter a prueba la teoría de la relatividad, más porque encontrar alguna anomalía o error en la teoría de Einstein abriría “una nueva ventana para la física” que por evidenciar al notable físico alemán. No obstante, los resultados obtenidos señalan que, una vez más, Einstein tenía razón.
En específico, los expertos comprobaron la generación de ondas gravitacionales en el espacio-tiempo, la propagación de luz en campos gravitacionales intensos, la inflexión de la luz y el efecto de dilatación de tiempo, que se traduce en que dentro de un campo gravitacional las manecillas de un reloj avancen con mayor lentitud, con 16 años de observaciones en un sistema de estrellas pulsares.
Las observaciones se realizaron entre 2003 y 2019 con datos de siete radiotelescopios sobre el sistema binario de estrellas pulsares PSR J0737−3039A / B, ubicado a 2,400 años luz de la Tierra.
Los científicos detallan que las estrellas pulsares orbitan entre sí en solo 47 minutos a una velocidad de aproximadamente 1 millón de kilómetros por hora (aproximadamente 620,000 millas por hora). Una de las estrellas gira 44 veces por segundo, mientras que la otra rota cada 2.8 segundos. Destaca que ambas estrellas son 30 por ciento más masivas que el sol, aun cuando solo tienen unos 24 kilómetros de ancho (unas 15 millas).
Se trata, señalan los expertos, de “un laboratorio inigualable” para poner a prueba la teoría de la relatividad de Einstein.
“Para nuestro deleite, pudimos probar uno de los aspectos torales de la teoría de la relatividad, que es la energía transportada por ondas gravitacionales”, señaló Michael Kramer, quien dirigió al grupo de científicos que validó la teoría de Einstein.
“Nuestras mediciones fueron 25 veces más precisas que las hechas en el púlsar Hulse-Taylor, que ganó el premio Nobel, y mil veces mejor que las se obtienen con detectores de ondas gravitacionales”, destacó.