La imagen de esta semana del Telescopio Espacial Hubble muestra dos galaxias lo suficientemente juntas como para tener un solo nombre compartido: Arp-Madore 608-333. Son lo que se conoce como galaxias en interacción, lo que significa que la enorme atracción de cada uno de sus campos gravitacionales está afectando al otro. El poder de la gravedad está deformando sus formas y distorsionándolas en formas desiguales.
«Aunque parecen serenos e imperturbables, los dos se están deformando sutilmente entre sí a través de una interacción gravitacional mutua que está interrumpiendo y distorsionando ambas galaxias», dijeron los científicos del Hubble en una nota que acompaña la publicación de la imagen. «Esta prolongada interacción galáctica fue capturada por la Cámara Avanzada para Encuestas del Hubble».
Estas galaxias que interactúan son diferentes de otros pares de galaxias, como el par llamado VV 191, fotografiado por el Hubble y el Telescopio Espacial James Webb esta semana. VV 191 parece ser un par cercano, pero de hecho, se superponen, no interactúan. Desde nuestro punto de vista en la Tierra, parece que los dos están ocupando el mismo espacio, pero uno está frente al otro. Un par similar de galaxias superpuestas que aparecen aún más juntas fue fotografiado por el Hubble a principios de este año.
Cuando se trata de galaxias que realmente interactúan porque están muy juntas, las cosas pueden complicarse. Las galaxias pueden chocar entre sí, creando enormes bolsas de formación estelar a medida que se fusionan. Estas interacciones pueden crear formas impresionantes e inusuales, como el sistema Angel Wing, en el que dos galaxias que se fusionan han formado la forma de alas. A veces, incluso más de dos galaxias pueden interactuar, como el Hickson Compact Group 31, también fotografiado por Hubble, que contiene cuatro galaxias que están en proceso de fusionarse en una.
Sin embargo, dos galaxias que chocan no siempre se fusionan para formar una galaxia más grande. A veces, estas colisiones pueden resultar en la aniquilación de una de las galaxias, y los científicos creen que es el agujero negro supermasivo que se encuentra en el corazón de casi todas las galaxias lo que determina si una colisión resultará en una fusión o en una galaxia destruyendo la otra.