Una startup orientada a limpiar la basura espacial ahora tiene la oportunidad de probar su tecnología después de asegurar un viaje a bordo para orbitar a bordo de un cohete Arianespace Vega-C.
ClearSpace, con sede en Suiza, espera lanzar su misión ClearSpace-1 en 2026 con el objetivo de capturar y eliminar un pedazo de escombros orbitales que pesa 247 libras (112 kilogramos).
La basura espacial en órbita terrestre baja es un problema apremiante. Comprendiendo partes de cohetes viejos, satélites fuera de servicio y fragmentos creados por colisiones entre estas partes, los escombros pueden causar más daños, potencialmente eliminando satélites en funcionamiento o incluso causando daños a la Estación Espacial Internacional o al nuevo puesto orbital operado por China.
La misión de ClearSpace intentará eliminar un adaptador de carga útil de un lanzamiento de cohete Vega en 2013. La nave espacial de la compañía usará una garra con cuatro brazos para agarrar la pieza y transportarla a una órbita más baja donde tanto la nave espacial como los escombros entrarán en la atmósfera y se quemarán.
El objetivo es demostrar la eficacia de la tecnología de ClearSpace, con un éxito que podría allanar el camino para la comercialización de la tecnología.
Luc Piguet, CEO y cofundador de ClearSpace, describió la próxima misión como «un punto de inflexión en la industria espacial, ya que necesitamos urgentemente aportar soluciones a un problema fundamental: estamos poniendo objetos en el espacio más rápido de lo que se están eliminando».
Stéphane Israël, CEO de Arianespace, señaló el alcance del problema de la basura, diciendo que actualmente hay más de 34,000 piezas de desechos espaciales de más de 10 centímetros y alrededor de 6,500 satélites operativos en órbita, un número que podría aumentar a más de 27,000 para fines de la década.
«Estas cifras demuestran la necesidad de encontrar soluciones innovadoras para preservar los beneficios del espacio para la humanidad y la vida en la Tierra», dijo Israël.
Se están elaborando varias soluciones para limpiar los desechos espaciales, y algunas de ellas han tenido más éxito que otras. Aún no ha surgido una operación comercial confiable y completamente probada, aunque ClearSpace claramente tiene la vista puesta en el premio.