Rusia volvió a registrar más de 1,000 muertes en un día debido al coronavirus. El número de contagios, en tanto, llega a las 30,000 personas diarias.
De esta manera, la nación pasó a ser una de las más afectadas durante esta pandemia, lo que ha motivado la preocupación por parte de las autoridades sanitarias.
Debido al número de contagios y muertes diarias, el presidente Vladimir Putin decretó el cumplimiento de una semana sin trabajo para todos los habitantes, lo que se ha conocido como vacaciones retribuidas.
Este periodo comenzará el 30 de octubre y se extenderá hasta el 7 de noviembre y busca frenar el dramático incremento en el número de contagiados en fechas recientes.
En tanto, las zonas que se han visto más afectadas podrán extender este periodo otros siete días a partir del 23 de octubre.
La buena noticia para los rusos es que sus salarios se mantendrán íntegramente durante este periodo. Por su parte, las empresas recibirán ayudas estatales que incluirán subvenciones y préstamos.
“La situación respecto a la infección por coronavirus sigue siendo difícil en el país. El ritmo de propagación de la infección se ha incrementado significativamente en algunas regiones. Al mismo tiempo, la tasa de vacunación de los ciudadanos sigue siendo baja”, señaló Putin.
La semana de descanso fue propuesta por la viceprimer ministra Tatiana Gólikova y la sugerencia fue aprobada por el mandatario.
Desde el inicio de la pandemia, Rusia acumula más de 8 millones de infecciones. En tanto, hasta el momento se han vacunado con dos dosis a 47.6 millones de personas.