Los smartwatch tienen múltiples aplicaciones, algunos de ellos vinculados al ámbito de la salud: son capaces de monitorear nuestro ritmo cardíaco, contar los pasos que damos y vigilar nuestros patrones de sueño.
Ahora también podrían ayudar a detectar de forma prematura un brote de COVID-19, de acuerdo con lo que señalan científicos de Scripps Research.
Ellos descubrieron que la combinación de los datos entregados por este dispositivo junto con lo síntomas podía predecir si una persona estaba contagiada.
Este hallazgo forma parte del estudio DETECT (Digital Engagement and Tracking for Early Control and Treatment), el cual aún se lleva a cabo.
¿En qué consiste?
El estudio incluyó a 30 mil personas de Estados Unidos, inscritas entre marzo y junio, las cuales compartieron los datos de sus dispositivos y reportaron síntomas cuando se sentían enfermos.
Cerca de 3,800 participantes informaron síntomas que iban desde un dolor de estómago a la tos, pasando por dificultades para respirar, y pérdida del gusto y el olfato.
De ellos, 333 fueron examinados para el COVID-19; 54 arrojaron positivo y 279 dieron negativo.
Los investigadores entonces intentaron predecir quiénes serían los que darían positivo o negativo con un modelo estadístico basado en los síntomas auto informados.
Funcionó, explican, tan bien como un modelo basado en los datos que entrega un dispositivo portátil como frecuencia cardíaca y duración del sueño, pero la combinación de ambos resultados para la prueba de COVID-19 resultó ser la más óptima.
«Considero que este enfoque es más útil a nivel de población, en términos de ver más actividad en una población a lo largo del tiempo», señaló el doctor Chip Schooley, especialista en enfermedades infecciosas.
Ahora, los investigadores podrían monitorear frecuentemente los datos entregados por los smartwatch junto con los síntomas auto informados por los usuarios, como una forma de detectar brotes del coronavirus y notificar a los funcionarios de la salud pública.
De esta forma, ellos podrían aumentar las pruebas en la comunidad y tomar otras medidas para reducir la propagación del virus.