En medio de todo el misticismo que rodea a Microsoft y su éxito como la empresa que hizo de la informática un negocio universal, no hay duda de que el gran acierto de Bill Gates, su fundador, fue identificar dónde se encontraba el dinero. Mientras que Apple se enfocó en los usuarios de a pie, Microsoft, aun sin menospreciar esfuerzos a ese mercado, dedicaba buena parte de su estrategia al segmento empresarial. Uno de esos pilares fue el lenguaje de programación COBOL-80, que la compañía lanzó el 11 de abril de 1978.
COBOL, siglas que refieren a Common Business Oriented Lenguage (Lenguaje Común Orientado a Negocios), es un lenguaje de programación que nació a finales de los años cincuenta como una opción universal para negocios.
El desarrollo de COBOL juntó a la pionera Grace Hopper, una científica informática y militar que destacó por ser la primera persona en utilizar el Mark 1 (el primer ordenador electromecánico enviado a la Universidad de Harvard en 1944), con varias empresas de la talla de IBM, RCA y General Electric.
COBOL es un lenguaje de programación basado en el idioma inglés, por lo que es legible incluso para personas sin conocimientos técnicos en informática o programación. El lenguaje tuvo varias iteraciones entre 1959 y 1974, hasta que Microsoft se montó a la ola con COBOL-80, apenas tres años después de su fundación, el 4 de abril de 1975.
Bill Gates llegó a ufanarse diciendo que no sabía qué lenguajes de programación existirán en el futuro, “pero seguro que COBOL estará todavía allí”.
Su vaticinio no estuvo errado. En 2005, un informe de la analítica Gartner Group estimaba que 75 por ciento de los datos generados por empresas eran programas creados en COBOL.
Se estima que en todo el mundo hay escritos unos 300,000 millones de líneas de código en COBOL. En contexto, si fueran impresas darían como resultado una montaña de papel de más de 600 kilómetros de altura.
Incluso en 2011 la compañía Micro Focus revivió a COBOL con una nueva edición llamada Visual COBOL, que actualizaba el lenguaje a los estándares modernos de otros lenguajes.
La última revisión de COBOL ocurrió en 2014 con la ISO/IEC 1989:2014, que adaptó el lenguaje para ser compatible con programación estructurada y orientada a objetivos.
Y pese a que en la actualidad cientos de empresas han migrado sus procesos y aplicaciones a lenguajes más modernos como Java, C++, Python y Javascript, COBOL sigue en uso.
En la cima de su popularidad en los años ochenta, el director James Cameron utilizó líneas de código escritas en COBOL para ilustrar la visión computarizada del cíborg asesino en The Terminator. Como la película, COBOL se volvió un clásico.