Seguramente nunca se han hecho la pregunta en una fiesta, o en un matrimonio o cuando ven la celebración de Fórmula 1, que al descorchar champagne, esa gente está soltando ondas de choques supersónicas.
El estudio publicado en Physics of Fluids, investigadores de Francia y la India hicieron simulaciones computacionales de dinámica de fluidos, que revelaron la formación, evolución y disipación de patrones de ondas de choque a medida que la mezcla de dióxido de carbono se dispara a través del cuello de botella en el primer milisegundo después del estallido del corcho.
Una de los fenómenos que sucede es que la mezcla de gases es bloqueada parcialmente por el corcho, impidiendo que el champán expulsado alcance la velocidad del sonido. Pero a medida que se produce la liberación del corcho, la mezcla de gases escapa a una velocidad supersónica, equilibrando su presión a través de una sucesión de ondas de choque normales y oblicuas.
«Nuestro artículo desentraña los inesperados y hermosos patrones de flujo que se esconden justo debajo de nuestras narices cada vez que se descorcha una botella de champán», dijo el coautor Gérard Liger-Belair, de la Université de Reims Champagne-Ardenne. «¿Quién podría haber imaginado los fenómenos complejos y estéticos que se esconden detrás de una situación tan común que vive cualquiera de nosotros?».