Un niño de solo nueve años de Malasia se transformó en el ganador del Lunar Loo Challenge, un particular concurso de la NASA para encontrar un nuevo diseño de inodoros espaciales.
«Ir al baño» en el espacio se ha transformado en todo un desafío para la NASA y, por lo mismo, ha destinado millones de dólares para su fabricación.
Como pretende enviar una misión tripulada a la Luna en 2024, la agencia especial necesita de una solución adecuada para los desechos corporales de los astronautas.
Y parece ser que la idea de Zy Shun Kang cumplió con los requisitos que estaba buscando la agencia espacial estadounidense. La propuesta del niño superó a casi 900 solicitudes de 85 países presentadas en la categoría junior.
Cómo funciona el inodoro espacial
El estudiante de tercer año de primaria ha diseñado una tecnología que se encaja dentro de un traje espacial, creando un vacío que aspira los desechos líquidos, como la orina, en la microgravedad del espacio.
El niño explicó que su proyecto usa una jeringa para evacuar el aire dentro de la botella para crear un estado de vacío. Luego extrae los desechos, sin usar electricidad ni motores.
Zy Shun quería hacer una versión mejorada del inodoro espacial, considerando que estos solo se pueden usar en microgravedad y la Luna tiene solo una sexta parte de la gravedad de la Tierra.
Según consigna Science Times, el niño aprendió astronomía leyendo libros, revistas y viendo programas sobre el tema. Incluso aprendió más sobre astronomía que sus padres, quienes se la presentaron.
Zy Shun espera que su inodoro espacial también se pueda usar en otros campos, como la medicina.