Una enorme cicatriz es lo que la sonda de la ESA, Mars Express, ha descubierto en Marte, en una zona llamada fosa de Aganippe y que está al pie de un enorme volcán.
Esta cicatriz serpenteante es una formación irregular de unos 600 km de longitud conocida como ‘graben’: un surco en forma de zanja con paredes escarpadas a ambos lados, informa la ESA.
La fosa de Aganippe atraviesa el flanco inferior de uno de los volcanes más grandes de Marte, el monte Arsia. Mars Express observa periódicamente el monte Arsia y sus compañeros cercanos en la región de Tharsis, donde se encuentran varios de los volcanes gigantes de Marte. Entre ellos se encuentra el monte Olimpo, el volcán más alto del Sistema Solar.
El monte Arsia mide 435 kilómetros de diámetro y se eleva más de 9 kilómetros por encima de las llanuras circundantes.
Sobre la enorme grieta, las teorías sostienen que se formó cuando el magma que ascendía por debajo de la colosal masa de los volcanes de Tharsis provocó que la corteza de Marte se estirara y agrietara.
La imagen de la cámara estéreo de alta resolución (HRSC) de Mars Express captura dos tipos diferentes de terreno: el denominado terreno accidentado, que comprende muchos montículos y valles de forma irregular agrupados entre sí, y el terreno lobulado, que está formado por acantilados de suave pendiente y escombros rocosos.