Completamente exitosa resultó la misión de la sonda Chang’e 6 de China, que logró traer rocas lunares desde el lado oscuro del satélite natural.
Las muestras llegaron en un aterrizaje de la sonda en Mongolia, donde fueron recogidas para su posterior estudio científico.
Compuesta por un orbitador, un módulo de aterrizaje, un vehículo de ascenso y una nave espacial de regreso, esta compleja misión se lanzó el 3 de mayo.
Touchdown! Chang'e-6 carrying lunar samples from the Moon's far side, for the first time, safely lands in Inner Mongolia https://t.co/I6ToMAjEb4 pic.twitter.com/jzz2tLrXo0
— China 'N Asia Spaceflight 🚀𝕏 🛰️ (@CNSpaceflight) June 25, 2024
«Se espera que las muestras de CE-6, siendo las primeras obtenidas de la cara oculta de la Luna, respondan a una de las preguntas científicas más fundamentales en la investigación de la ciencia lunar: ¿qué actividad geológica es responsable de las diferencias entre los dos lados?», dijo recientemente Zongyu Yue, geólogo de la Academia China de Ciencias.
China ha realizado pruebas recientes en la etapa central del cohete Long March 10, diseñado para transportar humanos a la Luna. Además, está desarrollando una nave espacial y un módulo de aterrizaje lunar con capacidades comparables a las de la NASA durante el programa Apolo en las décadas de 1960 y 1970.
Además, el país asiático tiene en agenda su próxima misión Chang’e-7, que viajará al polo sur de la Luna en 2026 y Chang’e-8, que alunizará en 2028 para realizar pruebas en terreno lunar.