Las primeras consecuencias de los escándalos en Blizzard comienzan a surgir. La compañía anunció que J. Allen Brack deja de ser el presidente de la compañía y su puesto lo asumirán dos personas de ahora en adelante: Jen Oneal y Mike Ybarra.
Oneal es vicepresidenta ejecutiva a cargo de desarrollo, quien además dirigió Vicarious Visions, uno de los estudios internos de Activision. En tanto, Ybarra tiene una vasta experiencia en la industria de los videojuegos y antes de llegar a Blizzard estuvo en el equipo de directores de Xbox.
Ambos compartirán la presidencia de Blizzard en lo que tiene que ver con desarrollo de futuros proyectos y operaciones generales de la compañía. Esto último es lo que está bajo la lupa, luego de la demanda que impusiera el estado de California contra Blizzard y Activision a causa de denuncias de acosos y abusos que sufrieron algunas empleadas por parte de personas en puestos de jefaturas.
Por su parte, J. Allen Brack entregó algunas palabras al sitio oficial de la compañía, en las que dice tener plena confianza de lo que pueden hacer tanto Jen Oneal como Mike Ybarra a la cabeza del estudio. Si bien no se entregaron detalles sobre su salida, no hay que ser adivino para notar que luego de lo ocurrido su lugar dentro de Blizzard ya no daba para más: las acusaciones tienen relación con la cultura laboral.
Sin ir más lejos, el ahora expresidente de Blizzard es mencionado en la demanda por el hecho de no haber atendido los reclamos de las víctimas ni tampoco dar una solución definitiva a las situaciones que ocurrieron dentro de la empresa de videojuegos a lo largo de los años.
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