No contentos con resucitar a un mamut del permafrost de Siberia, ahora un grupo de científicos quieren devolver a la vida a un bisonte extinto hace más de 8 mil años y cuyos restos momificado fueron recientemente necropsados en Rusia.
La criatura momificada fue descubierta en la localidad de Khaastaakh en la región de Verkhoyansk de Rusia en el verano de 2022 y donada al Laboratorio del Museo del Mamut de la Universidad Federal del Noreste (NEFU) en Yakutsk. Las investigaciones preliminares revelaron que el bisonte era un juvenil de sexo desconocido que tenía entre 1 y 2 años cuando murió. Los científicos aún no saben cuándo vivió el bisonte, pero especímenes similares encontrados en 2009 y 2010 datan de hace entre 8.000 y 9.000 años, escribieron los investigadores de NEFU en un comunicado.
Durante la necropsia, los investigadores tomaron muestras de lana, piel, huesos, músculos, grasa y cuernos del bisonte, además de extirpar completamente el cerebro del animal. Los tejidos están tan bien conservados que hay esperanza de que puedan ser utilizados para revivir las especies extintas.
«Estamos trabajando con un hallazgo único que podría clonarse en el futuro gracias a materiales seleccionados», dijo Hwang Woo Suk, un ex experto en clonación y colaborador de NEFU, en el comunicado.
De todas formas, Love Dalén, un paleogenetista de la Universidad de Estocolmo en Suecia que no participó en la necropsia, dijo al sitio especializado WordsSideKick.com que no está seguro del éxito de esta empresa.
«En mi opinión, no va a ser posible clonar animales extintos a partir de tejidos como este. Aunque los tejidos están excepcionalmente bien conservados, es probable que el ADN dentro de ellos esté demasiado degradado para ser clonado, agregó.
«Para hacer posible la clonación, uno necesita encontrar cromosomas intactos, pero lo que vemos incluso en los mejores especímenes es que cada cromosoma está fragmentado en millones de pedazos», dijo Dalén. «En mi opinión, es más probable que puedas lanzar una moneda y obtener caras mil veces seguidas que encontrar un cromosoma intacto de un espécimen que tiene miles de años».