La técnica de edición de genes conocida como CRISPR puede ser empleada para usos muy positivos, pero también podría acercarse a un territorio increíblemente controversial. Esa segunda categoría es la que describe a un proyecto que, según se informa, se está llevando a cabo en China, en el que un equipo de científicos está intentando crear los primeros niños del mundo, cuyo ADN ha sido alterado mediante el uso de la edición de genes. Incluso, se especula que la primera pareja de niños habría nacido con éxito.
Según MIT Technology Review, los investigadores en China han buscado reclutar parejas para el estudio. Su objetivo es modificar los embriones humanos de las parejas para eliminar un gen llamado CCR5. Al eliminar este gen, los investigadores creen que será posible hacer que cualquier descendiente sea resistente a enfermedades potencialmente fatales, como el VIH, la viruela y el cólera.
Los datos presentados como parte de los documentos de ensayos clínicos relacionados con el proyecto, que se remontan a marzo del 2017, indican que se ya han realizado pruebas genéticas en fetos de hasta seis meses. Yendo más allá, un informe de Associated Press sugiere que una pareja involucrada en el ensayo podría haber dado a luz a dos gemelas, llamadas Lulu y Nana, lo que también fue dado a conocer en un video de The He Lab.
El nacimiento confirmado del primer ser humano modificado genéticamente sería un hito importante en la ciencia, pero también sería extremadamente controversial. Al menos sería tan importante como la invención de la fertilización in vitro, en la cual un óvulo se combina con un espermatozoide fuera del cuerpo de la madre, ayudando así a las parejas que de otra manera no podrían tener bebés.
Siempre que tal hazaña pueda llevarse a cabo de manera segura, eliminar enfermedades como el VIH podría ser una aplicación positiva para esta increíble herramienta científica. Sin embargo, también plantea la posibilidad de los llamados «bebés de diseño», cuya apariencia o rasgos de personalidad pueden alterarse genéticamente. Además, es altamente problemático a nivel moral el permitir o aprobar experimentos con embriones sanos, o con fetos de más de seis meses de gestación, como el informe sugiere.
Jiankui He, el científico que dirige el proyecto, dijo que desea centrarse solo en aplicaciones médicas. «Apoyo la edición de genes para el tratamiento y la prevención de enfermedades, pero no para mejorar el aspecto físico o el coeficiente intelectual, lo que no es beneficioso para la sociedad», escribió en una publicación reciente en la plataforma de redes sociales chinas WeChat.
Interesantemente, la Universidad de Ciencia y Tecnología del Sur de Shenzhen, la organización de investigación vinculada al proyecto, ha dicho que no estaba al tanto de este trabajo, y que llevará a cabo una investigación al respecto.