El cometa Leonard ha podido ser observado durante su aproximación al Sol a través de dos naves espaciales de la NASA.
En su paso más cercano, el cometa se aproximará a 90 millones de kilómetros de nuestra estrella, un poco más de la mitad de la distancia de la Tierra. Si no se desintegra, su trayectoria lo arrojará al espacio interestelar desde donde nunca podrá regresar.
La NASA ha compartido algunas imágenes y un video que muestra el paso del cometa.
¿Quién está detrás de este descubrimiento?
El cometa Leonard fue descubierto en enero de 2021 por Gregory Leonard, quien lo detectó en imágenes tomadas desde el Observatorio del Monte Lemmon en Arizona.
El astrónomo es especialista en investigación del Laboratorio Lunar y Planetario de la Universidad de Arizona. En una entrevista con el sitio Space, el experto explicó cómo se produjo el descubrimiento del cometa.
En la entrevista, Leonard destacó el hecho de que el hallazgo resultó inesperado y casi fortuito, ya que en ese momento estaban buscando asteroides y otro tipo de cuerpos.
“Son inesperados porque buscamos asteroides cercanos a la Tierra y solo en ocasiones tropezamos con lo que parece ser un cometa, y entonces informamos de ellos al Minor Planet Center de Harvard, Massachusetts, que es el centro de intercambio de información para todas las observaciones de asteroides y cometas”, señaló el astrónomo.
Leonard explicó que uno de los aspectos que más le llamó la atención acerca de este cometa fue su órbita, la que permite que sea observado fácilmente desde nuestro planeta.
“Lo inesperado de este cometa fue su órbita. A diferencia de la mayoría de los cometas que se descubren a lo largo del año, este cometa se encuentra en una órbita que lo acerca relativamente al Sol y a la Tierra, lo suficientemente cerca como para que pueda ser visto desde el patio trasero por observadores casuales”.
Es posible que esta sea la última aparición de Leonard, cuyo nombre oficial es C/2021 A1, por lo menos en el sistema solar, ya que los científicos esperan que vuelva a acercarse a la Tierra dentro de 80 mil años.
El astrónomo espera que el paso cercano por la Tierra permita que muchos astrónomos puedan observarlo y estudiarlo, descubriendo así de qué está hecho el cometa, lo que es en la actualidad uno de sus principales misterios.