El Bentley Mulsanne Speed 2017ofrece el rendimiento, la artesanía, y el lujo de un objeto precioso construido a mano.
El buque insignia de Bentley no es un mero “sedán de lujo”, ni mucho menos. El vehículo al momento nos remonta a una época de ensueño en la cual los coches eran una obra de arte construida a mano, diseñados sólo para los conductores más exigentes (y más ricos) del mundo.
Relacionado: Continental GT Speed: El Bentley más potente jamás fabricado
El Mulsanne realizó una serie de cambios para su modelos del año 2017. Visualmente, se incluyen nueva hoja de metal desde la punta de la defensa delantera de la base del pilar A. Además, una amplia parrilla con lamas verticales hacen un discreto homenaje a los modelos históricos de Bentley; faros tipo joya, y luces traseras revisadas con formas de “B” (de Bentley) insertos.
Y, sin embargo, hay más de lo que parece.
Por ejemplo, la compañía diseñado neumáticos que incorporan una capa especial rellena de espuma que reduce ruido de la carretera por 50 por ciento. Además,
como ya te contábamos hace unos días atrás, para la versión 2017 existirá una tercera variante llamada Mulsanne Extended-wheelbase (EWB), limitado a sólo 300 ejemplares en todo el mundo. Los compradores que no necesiten el espacio adicional podrán ordenar el Mulsanne “normal”, mientras que el Mulsanne Speed es para los conductores que tienen prisa. O que les gusta vivirla.
En cuanto a lo que hay bajo el cofre, Bentley se ha resistido a la tentación de poner en su buque insignia el motor W12 de 6.0 litros que se encuentra en el Bentayga. No es algo malo, en lo absoluto, ya que el Mulsanne funciona a la perfección con el motor V8 de 6.75 litros histórico de Bentley. Coloquialmente llamado el 6 ¾ , tiene su origen en 1959, a pesar de que ha sido actualizado una y otra vez durante las últimas seis décadas.
Los ocho cilindros proporcionan 530 caballos de fuerza a 4,000 rpm., y 811 libras-pie de torque a 1,750 rpm. 530 caballos es una cifra impresionante por sí misma, pero 811 libras-pie es francamente una locura. Toda esa potencia se canaliza a las ruedas traseras a través de una transmisión automática de ocho velocidades que cambia tan suave como la seda. Acelera de cero a 60 mph en 4.8 segundos, lo que es francamente alucinante teniendo en cuenta de que este “buque” pesa cerca de 6,000 libras, 2,721.5 kg., y alcanza una velocidad máxima de 190 mph, casi 306 km/h.
En el interior, la atención al detalle es asombrosa. Posee un nivel de refinamiento en la cabina que es difícil de poner en palabras. Para resumir, valga citar las propias palabras de Bentley: “Si algo parece cuero, lo es; si algo parece madera, lo es; y si algo parece algún metal, es justamente ése metal”. Cada componente se siente y se ve sólido. Si la cabina del Mulsanne fuese una habitación de hotel, sería un cinco estrellas Súper Lujo, o inclusomás.
Relacionado: Video: Ayer y hoy del Bentley continental
Los equipos de maniobra se reducen al mínimo gracias a una pantalla táctil de ocho pulgadas inserta en el tablero de instrumentos. Es totalmente compatible con Apple CarPlay. Android Auto aún no está disponible, pero en Bentley aseguran que aquello está en la lista de tareas pendientes.
Rápido, lujoso y tranquilo, el Bentley Mulsanne Speed 2017 es un avión privado que va sobre cuatro ruedas. La idea de una limusina construida también para los entusiastas de la conducción puede sonar en principio como una contradicción, pero cada experiencia (como pasajero, y como conductor) es única en su tipo. En realidad, te costará poder elegir dónde querrás ir.