Por primera vez en la historia, astrónomos lograron observar un fenómeno conocido como espaguetificación, o en palabras más sencillas, lo que ocurre cuando un agujero negro destruye primero a una estrella para luego devorarla.
Hasta la fecha, este fenómeno se había detectado por oleadas de radiación electromagnética que salían de los agujeros negros y que se atribuían a la destrucción de estrellas que se acercaban demasiado a la antimateria. Nunca se había visto directamente la forma resultante de la estrella, hasta ahora.
Esto se conoce científicamente como evento de disrupción de marea y consiste en que la fuerza gravitacional del agujero negro hace que la materia de la estrella se estire tanto hasta que parezca un espagueti. Y una vez que esos filamentos son absorbidos por el agujero, emanan las oleadas de radiación que los astrónomos habían detectado por décadas y con las que sustentaban la teoría.
Las estrellas mueren por causas naturales, ya sea que se apaguen o bien exploten en una supernova. En cambio, el efecto espagueti es un final más trágico y puede ocurrir cuando una estrella desprevenida se acerca al centro de una galaxia en la que un agujero negro masivo está esperando para acabar con lo que se cruce.
No es primera vez que se estudia esté fenómeno tan cerca. El año pasado, astrónomos europeos y americanos detectaron un evento similar en una estrella cuya masa era similar a la del Sol, pero que perdió la mitad luego de ser espaguetificada por un agujero negro. El trabajo de observación duró más de seis meses y se logró gracias a cadenas de telescopios repartidas por todo el mundo.