El reciente descubrimiento de fosfina -posiblemente biogénica- en las nubes de Venus recordó al mundo científico que algunos de los ingredientes conocidos para la vida tal como la conocemos existen disponibles en otros lugares del Sistema Solar.
¿Dónde están los otros lugares más prometedores para la vida extraterrestre? El físico planetario Gareth Dorrian, investigador de la Universidad de Birmingham, publicó en The Conversation un análisis con los otros cuatro lugares del Sistema Solar más prometedores para el desarrollo de la vida.
Marte
El investigador detalla que Marte es uno de los mundos más parecidos a la Tierra del Sistema Solar: tiene un día de 24.5 horas, capas polares que se expanden y contraen con las estaciones, además de características de la superficie esculpidas por el agua durante su historia.
«La detección de un lago debajo de la capa de hielo del polo sur y el metano en la atmósfera marciana (que varía con las estaciones e incluso la hora del día) hacen de Marte un candidato muy interesante para la vida. El metano es importante ya que puede producirse mediante procesos biológicos. Pero la fuente real del metano en Marte aún no se conoce”, recuerda Dorrian.
Aunque admite que es probable que en algún momento haya tenido un “entorno mucho más benigno”, en la actualidad “tiene una atmósfera seca y muy fina compuesta casi en su totalidad por dióxido de carbono”, lo que ofrece escasa protección contra la radiación solar y cósmica.
«Si Marte ha logrado retener algunas reservas de agua debajo de su superficie, no es imposible que todavía exista vida”, apunta.
Europa
Europa es una de las tres lunas más grandes de Júpiter. Un poco más pequeña que la luna de la Tierra, orbita al gigante gaseoso una vez cada 3.5 días terrestres.
«Europa está constantemente comprimida y estirada por los campos gravitacionales en competencia de Júpiter y las otras lunas galileanas, un proceso conocido como flexión de mareas”, explica el investigador.
Agrega que es probable que se trate de un mundo geológicamente activo, como la Tierra, porque la “fuerte flexión de las mareas calienta su interior rocoso y metálico y lo mantiene parcialmente fundido”.
La superficie de Europa es una vasta extensión de hielo de agua y los científicos piensan, que debajo de la superficie congelada, todavía habría una capa de agua líquida, que podría tener más de 100 kilómetros de profundidad.
«En el fondo de este mundo oceánico es concebible que encontremos respiraderos hidrotermales y volcanes del fondo del océano. En la Tierra, tales características a menudo sustentan ecosistemas muy ricos y diversos”, apunta el investigador.
Encélado
Encélado es el sexto satélite más grande de Saturno y también estaría cubierta con un océano de agua líquida subterránea.
Este lugar llamó la atención de los científicos por primera vez como un mundo potencialmente habitable después del descubrimiento sorpresa de enormes géiseres cerca del polo sur, explica Dorrian.
“Estos chorros de agua escapan de grandes grietas en la superficie y, dado el débil campo gravitacional de Encélado, se esparcen al espacio. Son una clara evidencia de una reserva subterránea de agua líquida”, agrega.
Además, se detectaron moléculas orgánicas y partículas de silicato rocoso, que solo pueden estar presentes si el agua del océano subterráneo estaba en contacto físico con un fondo rocoso a una temperatura de al menos 90˚C.
“Esta es una evidencia muy sólida de la existencia de respiraderos hidrotermales en el fondo del océano, que proporcionan la química necesaria para la vida y fuentes de energía localizadas”, explica el investigador.
Titán
Titán es la luna más grande de Saturno y la única luna del Sistema Solar con una atmósfera sustancial. Contiene una espesa neblina naranja de moléculas orgánicas complejas y un sistema meteorológico de metano en lugar de agua, con lluvias estacionales, períodos secos y dunas de arena en la superficie creadas por el viento, detalla Dorrian.
La atmósfera se compone principalmente de nitrógeno, un elemento químico importante que se utiliza en la construcción de proteínas en todas las formas de vida conocidas.
Las observaciones también han detectado la presencia de ríos y lagos de metano y etano líquidos, y posiblemente, criovolcanes, características similares a volcanes que hacen erupción de agua líquida en lugar de lava. Esto sugiere que tendría una reserva subterránea de agua.
La temperatura de la superficie de Titán es de -180° C, demasiado frío para que exista agua líquida. «Sin embargo, las abundantes sustancias químicas disponibles en Titán han suscitado especulaciones de que podrían existir allí formas de vida, potencialmente con una química fundamentalmente diferente a la de los organismos terrestres”, precisa el investigador.