Capcom tuvo algunos años de silencio en los que sus franquicias parecían no dar en el clavo con las nuevas audiencias. Pero a partir de Resident Evil 7, todo fue cima hacia arriba. Monster Hunter: World, Resident Evil 2 y Devil May Cry 5 fueron un éxito tanto por la crítica como por los jugadores, siendo aclamados por todos.
Pero reportes recientes indican que hay un caballito de guerra que aún está dando pelea como el videojuego más vendido de la compañía, el cual a su vez está cumpliendo diez años en 2019. Se trata de Resident Evil 5, un título que resultó ser controversial por olvidar la poca pero aún existente esencia de la franquicia original en Resident Evil 4, apostando a la acción ante todo. Pero aún así, hizo un gran trabajo en ser un videojuego competente, divertido y con mucho potencial para ser jugado una y otra vez gracias a su componente online.
La franquicia de Resident Evil siempre se destacó por ser una de las pioneras en el género de survival horror, pero todo cambió con la historia de Leon Kennedy en su viaje a través de España. Los ángulos de cámara que volvieron a los primeros títulos tan únicos fueron eliminados por completo, optando por una vista desde los hombros en tercera persona y priorizando la acción.
En Resident Evil 5 esto se potencia aún más con la posibilidad de jugar la campaña en cooperativo, eligiendo entre dejar que la inteligencia artificial del juego se encargue de nuestra compañera Sheva o buscando un compañero online o desde nuestra lista de amigos.
EN COMPAÑÍA ERA UNA EXPERIENCIA FENOMENAL
La primera opción nunca fue la mejor, ya que era bastante incompetente y se terminaba dependiendo mucho en los momentos críticos sin recibir la respuesta esperada. Pero si conseguíamos un compañero o compañera, como fue mi caso con un amigo durante años, se trataba de una experiencia fenomenal.
El argumento, protagonizado por Chris Redfield (persona clave en el desarrollo de Resident Evil) nos llevaba por las tierras de África, donde se estaba experimentando nuevamente con un virus que convertía a las personas en seres violentos y sin conciencia sobre sus actos. Criaturas inteligentes entre ellas, aceleradas por su agresividad para impedir nuestro paso.
Sheva Alomar, nuestra compañera durante toda la historia, se une como el primer personaje en ir de lado a lado con el Chris. Similar a Resident Evil 4, ambos mantienen un inventario propio, pero con la posibilidad de poder intercambiar cosas entre ellos en medio de la batalla. Sistemas como utilizar hierbas para curar heridas (representadas en su mayoría como aerosoles aquí) también jugaban un rol importante, ya que uno podía optar por curarse a si mismo o dividir el efecto con su compañero o compañera si se encontraba lo suficientemente cerca.
Otro aspecto principal, el cual probablemente es mi favorito, es la progresión y las mejoras que uno podía implementar a cada una de sus armas. Antes de comenzar cada misión, los jugadores pueden ingresar a una tienda para vender tesoros encontrados a cambio de oro o simplemente comprar nuevo equipamiento. Sin embargo, uno también puede tomar un arma y mejorar sus atributos (velocidad de recarga, impacto, posibilidad de headshot, y más).
Esto agregaba una capa de complejidad que hacía de la experiencia adictiva, siempre buscando llegar al próximo nivel o volviendo a visitar uno anterior para conseguir oro y continuar trabajando en ellas. Como si esto fuera poco, una vez que se lograba llegar al máximo de mejoras, una nueva arma de la misma variante era desbloqueada, volviendo a presentar el ciclo para ir y comenzar a mejorarla. Nunca se terminaba, y es algo que funcionaba muy bien si se sabía coordinar con nuestro compañero.
La campaña se destaca por su rejugabilidad
Mientras que uno se enfocaba en rifles de asalto o francotiradores, el otro podría especializarse en escopetas y armas de cuerpo a cuerpo. Si a eso le sumábamos granadas siempre a mano, éramos imparables. Y por fortuna, Resident Evil 5 nunca dejaba de ser un desafío.
La variedad de misiones aseguraba el recorrido por distintos lugares, cada uno con sus propios enemigos y jefes esperando en los momentos cruciales de la historia. Y un agregado interesante es que cada uno llevaba su propio sistema de puntaje, brindando una letra al final del recorrido dependiendo de nuestro desempeño, contando cuántos disparos fallamos o el tiempo que nos llevó terminar la misión.
Entre estos dos sistemas, la campaña se destacó por su capacidad para ser jugada una y otra vez, lo que ayudó a compensar una historia que tiene sus momentos pero no es para nada memorable (exceptuando una pelea en particular con dos jefes en simultáneo, la cual está entre mis favoritas de la franquicia). Y por supuesto, toda esta progresión podía ser mantenida a través de misiones sin problemas incluso luego de haber terminado con el juego.
Pero si volver a jugar la campaña no era lo tuyo, Resident Evil 5 tenía un as bajo la manga: el modo Mercenarios.
El valor competitivo, en particular jugándolo de forma online, tomaba una forma aún mayor.
Este fue introducido por primera vez en Resident Evil 4, que era desbloqueado una vez finalizaba la campaña. Se trata de niveles separados de todo lo demás, que tomaban escenarios ya vistos, pero les agregaban una vuelta de tuerca: oleadas de enemigos se acercaban a nosotros, y debíamos derrotar la mayor cantidad posible a contrareloj. Pero si nos estábamos quedando sin tiempo, podíamos romper unos objetos en el mapa para incrementarlo, agregando así un valor estratégico a cómo nos manejábamos en cada nivel.
Y así también, lograba cambiar un poco la costumbre que habíamos generado pasando por la campaña principal. En el 5 encontraba todo mucho más elaborado, permitiéndote elegir entre un extenso rango de personajes y una mayor variedad de mapas. El valor competitivo, en particular jugándolo de forma online, tomaba una forma aún mayor.
Luego de diez años y con puertos que lo llevaron a consolas modernas junto a sus DLCs, Resident Evil 5 logró crear un nicho alrededor, incluso si no se trata de uno compuesto por los fieles seguidores de la saga. Ahora que Capcom vio el éxito que tuvo Resident Evil 7 presentando una experiencia en primera persona y volviendo al horror que tanto los destacó, el futuro de la franquicia se mantiene incierto. El remake de Resident Evil 2 dio de qué hablar, mientras que Resident Evil 0, Resident Evil 1 y Resident Evil 4 llegarán a Nintendo Switch en unas semanas.
Pero por mi parte, seguiré esperando el mensaje de mi amigo invitándome a revivir ese título que tanto aprendimos a amar, a pesar de sus fallas y desconexión con el resto. Y, al parecer, no fuimos los únicos en el mundo en pensar de esta manera.