Un proyecto demuestra que las papas pueden ser capaces de soportar las condiciones del planeta Marte.
Sólo unas pocas cosas mantuvieron vivo a Mark Watney en El Marciano: ingenio, ingenio, y un puñado de papas. Sin los tres, probablemente no habría sobrevivido.
Pues bien, los resultados preliminares de una investigación llevada a cabo en el Centro Internacional de la Papa (CIP) sugieren que si un astronauta se encuentra atrapado en Marte, al menos sería capaz de cultivar papas en condiciones parecidas a las de Marte.
Esta fase, en concreto, es parte de un proyecto de un año llevado a cabo por el CIP, la NASA y la Universidad de Ingeniería y Tecnología (UTEC) en Lima, Perú, donde los científicos han tratado de determinar las condiciones extremas en las que pueden crecer los tubérculos .
Los investigadores sometieron un cultivo a condiciones similares a las encontradas en el Planeta Rojo, incluyendo la presión del aire y los niveles de oxígeno y dióxido de carbono.
Sin embargo, la planta no sufrió – el agua y el suelo fertilizado de la Tierra proporcionaron nutrientes y estructuras adicionales-. Durante todo el proceso, unos sensores monitorearon las condiciones y las cámaras transmitieron en directo el crecimiento.
Eventualmente, la papa brotó. Los científicos concluyeron que las misiones de Marte podrían preparar el suelo con un montón de nutrientes y una estructura suelta para permitir el flujo suficiente de aire y agua.
Andy Weir explicó a Engadget que los científicos ya sabían que las papas podían crecer en condiciones semejantes a las de Marte. Este experimento sólo ha impulsado los límites un poco más.
La investigación muestra promesas para los futuros astronautas y para las personas aquí en la Tierra, donde existe la preocupación de que el cambio climático puede estar amenazando a los pequeños agricultores con escasez de alimentos.
«El Centro Internacional de la Papa, a través de su programa de mejoramiento, busca constantemente papas con mejores atributos que ayuden a los campesinos en las áreas más pobres”, explica Walter Amoros a Digital Trends.
«Mirando nuestro trabajo ‘Papas para Marte’, la idea es que probemos estos materiales genéticos bajo condiciones extremas de suelo con altas concentraciones de sales y compuestos oxidantes que impiden el desarrollo de cualquier planta de cultivo», agrega.
«La identificación de una variedad de papa que pueda tolerar estas condiciones extremas, definitivamente significará que hemos encontrado una variedad que puede usarse en cualquier parte de la Tierra con condiciones extremas de estrés biótico y abiótico, y tal variedad podrá aliviar la pobreza, mejorar la seguridad alimentaria y adaptarse más fácilmente al cambio climático», concluye.