Un equipo de científicos adscritos al Instituto de Investigación del Acuario de la Bahía de Monterrey (MBARI) de California hizo un fascinante hallazgo en aguas profundas del Pacífico: el colmillo de un mamut.
El descubrimiento, tan sorprendente como inverosímil, tiene sus orígenes en una expedición de 2019, cuando el biólogo marino Steven Haddock y el piloto de un submarino exploraban un monte de aguas profundas a unos 300 kilómetros de la costa de California. Ambos vieron lo que parecía el colmillo de un elefante, así que, interesados en el objeto, recolectaron apenas una porción.
Dos años después regresaron al sitio del hallazgo, donde encontraron que, sorpresivamente, el colmillo de 1 metro de longitud seguía ahí. “Encontrar este colmillo de mamut, tan profundo y tan lejos de la costa, es lo más improbable que he experimentado”, dijo a Gizmodo el biólogo marino que halló el colmillo.
Antes de que te hagas de todo tipo de teorías increíbles —nosotros pensamos en el banquete de un megalodón—, los expertos dicen que es probable que el mamut haya sido arrastrado al fondo del océano por alguna inundación o un tsunami. Sin embargo, lo verdaderamente increíble es que el colmillo haya permanecido ahí por al menos 1.5 millones de años, que es la antigüedad de la especie a la que se cree que pertenece el colmillo: un mamut colombino (Mammuthus columbi).
Sobre su asombroso estado de conservación, los expertos dicen que se debe al ambiente frío y de alta presión. Después de todo, el colmillo se encontró a 3,070 metros de profundidad.
Tras el hallazgo, los científicos realizarán todo tipo de pruebas genéticas para determinar datos del mamut como su historia, edad y linaje. Incluso se habla de secuenciar su ADN.