William H. Gates III, el multimillonario, filántropo, magnate, empresario de la informática y cofundador del gigante Microsoft, nació en 1955. Así es, hablamos de Bill Gates, quien este 28 de octubre cumple 66 años.
Gates advirtió sobre la amenaza de una pandemia mucho antes de que alguien escuchara sobre el COVID-19, y en su libro más reciente ha alertado sobre otra amenaza que como humanidad tenemos que enfrentar, por lo que nos incita a tomar medidas ahora si es que queremos evitar una catástrofe en el futuro.
Nos referimos a Cómo evitar un desastre climático: las soluciones que ya tenemos y los avances que aún necesitamos, el libro que Gates lanzó en febrero de este año. Como su título sugiere, este profundiza en el problema del cambio climático y las múltiples soluciones que el mundo necesita emplear para evitar los peores escenarios.
Dentro de su obra de 384 páginas, Gates expone varios consejos que, como individuos, podemos seguir para ayudar a combatir el cambio climático, sin importar si somos ciudadanos y no grandes líderes o activistas; para Gates todo suma.
En un extracto del libro, el fundador de Microsoft insiste en que “aunque los pasos más impactantes que podemos tomar para evitar un desastre climático deben ocurrir a nivel gubernamental, tú tienes el poder de efectuar el cambio como ciudadano, consumidor y empleado o empleador”. Estas son algunas de las recomendaciones.
Preferir hamburguesas hechas a base de vegetales
Gates sabe que a la mayoría de las personas le encantan las hamburguesas, y que podemos consumir bastantes a lo largo de nuestra vida. Pero lo que recomienda Gates es preferir las hamburguesas a base de vegetales (plant-based) antes que las hechas de carne.
De esa forma, le envías una “señal” al mercado indicando que existe una demanda de ese producto, provocando que las empresas comiencen a innovar en esa área hasta masificarlo. Lo mismo ocurre con los productos lácteos.
Asimismo, se conseguirá que las hamburguesas a base de vegetales eventualmente sean más baratas y que tengan un mejor sabor, porque si mucha gente pide un producto, las empresas comenzarán a esforzarse por lograr algo bueno para vender. Es un efecto en cadena que a la larga nos beneficiará a todos.
Esto permitirá que nuestra alimentación y las empresas se apoyen menos en los vacunos, los cuales son una gran fuente de gas metano, que es justamente lo que está provocando el efecto invernadero y que el planeta se caliente.
Utilizar autos eléctricos
Según Gates, lo que provocan el consumo y la masificación de las hamburguesas plant-based también sucede con los autos eléctricos, los aparatos de consumo eficiente de energía y los materiales de construcción con bajos niveles de emisión de carbono.
Si bien los autos eléctricos no son adecuados para todos —no son la mejor opción para alguien que realiza muchos viajes de larga distancia por carretera, ya que el sistema de carga puede ser un inconveniente—, se están volviendo más asequibles para muchos consumidores.
“Este es uno de los lugares donde el comportamiento del consumidor puede tener un gran impacto: si la gente compra muchos, las empresas producirán muchos”, mencionó Bill Gates.
Reducir las emisiones en el hogar
Dependiendo de cuánto dinero y tiempo podamos ahorrar, Gates dice que podemos reemplazar las bombillas incandescentes por ledes, además de instalar un termostato inteligente, aislar las ventanas, comprar electrodomésticos eficientes o reemplazar el sistema de calefacción y de aire acondicionado con una bomba de calor (cuando se pueda).
En el caso de ser arrendatario, Gates sugiere hacer los cambios que estén bajo nuestro control, como reemplazar bombillas, y alentar al propietario a realizar el restos de los cambios.
Finalmente, si se trata de una casa nueva o renovar una antigua, podemos optar por usar acero reciclado y hacer que la casa sea más eficiente mediante el uso de paneles aislantes estructurales, encofrados aislantes de hormigón, barreras radiantes para áticos o techos, aislamiento reflectante y aislamiento de cimientos.
Incentivar a los líderes a comprar productos “verdes”
Por otro lado, los gobiernos y las empresas compran más artículos que los hogares, de acuerdo con Gates. Por eso es importante que, como “empleador y votante”, incentivemos a nuestros superiores y representantes (políticos, líderes y activistas) a que se comprometan a comprar productos y servicios “verdes”.
Esto se refiere a los productos que le hacen el menor daño posible al medio ambiente, ya sea durante su producción, uso o degradación. A estos productos también se les conoce como ecoamigables o sustentables.
Esas personas son quienes también fabrican y construyen lo que la gente compra, entonces nuestra tarea es alentarlos a que encuentren y establezcan estándares verdes, ya sea al hacer llamadas, escribir cartas, asistir a reuniones con autoridades o cualquier instancia donde se pueda dar un diálogo y, por supuesto, votar.
Gates incluso dice que podemos postularnos a algún cargo dentro de nuestra comunidad o gobierno. De hecho, afirma que no es necesario intentar obtener un cargo muy alto, incluso tener un rol más pequeño en una municipalidad, por ejemplo, puede generar un impacto.
Los líderes del área empresarial y política también pueden invertir más en investigaciones y en el desarrollo necesario para crear nuevas tecnologías, para que podamos reemplazar las que usamos actualmente y que dañan el medio ambiente.
Alzar la voz sin importar quiénes somos
Otro punto que destaca Gates es alzar la voz sin importar quién somos. Si bien fueron los activistas de distintas partes del mundo quienes pusieron el cambio climático en la agenda global, ahora es necesario que los ciudadanos también se unan a esto para acelerar las soluciones.
Generar un cambio para detener un desastre climáticos requerirá que los empresarios y gobiernos tomen decisiones difíciles, y la manera más rápida de generar eso es dejar en claro que nosotros, los ciudadanos, demandamos ese cambio.
Gates afirma que todos podemos influir, ya sea como ciudadano, consumidor, empleado o líder, y que todos tenemos que poner de nuestra parte para que resulte. Según el empresario, juntos podemos cambiar la economía en las próximas décadas y hacer un mejor futuro para todos.