Siguiendo los pasos de otras empresas, la compañía de entregas UPS reveló que empezará a usar gafas de RV, como el HTC Vive, para entrenar a los nuevos conductores para detectar y hacer frente a los probables peligros de la carretera que se podrían encontrar durante sus carreras de entrega.
Los módulos de capacitación de VR se desarrollarán en nueve centros de capacitación denominados «Integrad» en los Estados Unidos, y reemplazarán los dispositivos de pantalla táctil que UPS utiliza actualmente para el entrenamiento de los conductores.
Un video de UPS que destaca esta tecnología muestra a una persona que lleva gafas de RV mientras «conduce» una camioneta, usando el tipo de volante con los que muchos ávidos jugadores de videojuegos estarán familiarizados. El entrenador puede ver las decisiones de conducción del aprendiz en un par de pantallas en la sala, lo que permite analizar sus habilidades.
«La realidad virtual ofrece un gran salto tecnológico en el campo de la capacitación en seguridad de los conductores», dijo Juan Pérez, jefe de información e ingeniería de UPS. «La RV crea un paisaje de calles realista que deslumbrará incluso al más joven de nuestros conductores, incluso a aquellos cuya exposición anterior a la tecnología fue a través de videojuegos».
UPS ha demostrado anteriormente cómo le gusta utilizar la nueva tecnología en un esfuerzo por impulsar su negocio. A principios de este año, por ejemplo, se reportó que estuvo estudiando la idea de usar aviones no tripulados para realizar algunas de sus entregas. Incluso ha construido un prototipo de este sistema, con un camión de entregas UPS que tiene un techo que se abre para permitir que el dron salga, haga una entrega, y retorne para recoger otro paquete.
Si UPS puede perfeccionar el diseño y obtener el permiso de la Administración Federal de Aviación, se prevé el uso de su sistema en las zonas rurales donde podría haber direcciones de entrega a varios kilómetros de distancia difíciles de encontrar o que sean duplicadas. En tal escenario, el conductor del camión haría una de las entregas, mientras que el dron haría la otra, ahorrando tiempo al conductor y, al menos en teoría, asegurando un servicio más rápido para los clientes.