Samsung tiene la extraña habilidad de impresionarnos con productos de primerísimo nivel, para luego estrellarse contra muros que la propia marca levanta. No vamos a hacer leña del desastre del Galaxy Note 7, ni tampoco ahondar en la herida del lanzamiento en falso del Galaxy Fold, pero —más allá de los brillos y estrellas presentadas en su último evento— Samsung pasó llamativamente por alto varios productos y giros estratégicos, como si la historia no fuera con ellos. Vamos a recordar las sonoras ausencias que ahora el fabricante parece no querer recordar.
Galaxy Fold
Samsung se la jugó presentando el transgresor y llamativo Galaxy Fold, un teléfono plegable con el que la compañía parecía dejar atrás al resto de sus rivales… y a varios cuerpos de distancia. Aquel dispositivo era tremendamente arriesgado y se ve que la presión por ser de los primeros en salir a este nuevo mercado pagó un elevadísimo peaje que bien recordarás. Problemas en el aparato en las primeras unidades llevaron a la empresa a retirarse por donde había llegado y replantearlo todo.
La cuestión es que allí nuevamente se equivocó con la comunicación, al aplicar una maniobra de oscurantismo que no ha hecho sino elevar las suspicacias. Qué gran ocasión tuvieron los coreanos de aportar un poco de luz al asunto en el Unpacked, pero siguieron como si nada, centrando todos sus fuegos artificiales en el Galaxy Note 10, sin dar más explicaciones por lo sucedido.
Bixby, ¿estás ahí?
El gigante asiático también pasó de puntillas con referencia a Bixby, su vanagloriado y esperado asistente virtual basado en inteligencia artificial en el que tantas expectativas depositó. Ni un avance, ni un progreso, en un sistema que ya funcionaba con bastantes dificultades en los terminales en los que está disponible. La cuestión es que Bixby sigue ahí, puesto que también acompañará al flamante Galaxy Note 10, pero parece que Samsung lo tiene arrinconado tras una columna en la esquina de la deshonra.
Este ninguneo no viene solo, puesto que junto con el asistente virtual se esperaba también un hardware: la bocina inteligente Galaxy Home, de la que tampoco sabemos nada ni se mencionó en el Unpacked. Está claro que el fabricante adopta la estrategia de la avestruz en aquellos productos o servicios que no han salido como se esperaba…
¿Qué ha pasado con el jack de audífonos?
Menuda fiesta se dio Samsung a cuenta de la eliminación del conector de audífonos en las últimas generaciones del iPhone: chanzas, risas abiertas en sus presentaciones, intento de ridiculizar… y de pronto, llega el Galaxy Note 10 imitando este aparentemente catastrófico movimiento de Apple. Como clientes, no esperamos que una marca sea perfecta, pero al menos sí coherente y se echó de menos una explicación sobre por qué, ahora, ya no es necesario dicho puerto.
¿Va a estar Android para siempre en los teléfonos de Samsung?
Hay que reconocer que el golpe de efecto fue sensacional: el mismísimo Satya Nadella dando un espaldarazo a la estrategia del fabricante asiático por convertir sus teléfonos en potentes herramientas de trabajo. DeX sigue siendo el pilar en este movimiento y contar con el respaldo de Microsoft le otorga un peso definitivo. Y nos parece una maniobra muy hábil por parte de Samsung, pero tampoco hubiera sobrado contar con algún apoyo por parte del principal pilar de sus móviles: Google.
Los sucesos acontecidos en torno a Android con Huawei no han hecho sino revelar una debilidad abrumadora de los fabricantes terceros de la plataforma: ¿qué seguridad tienen de poder seguir utilizándola en el futuro con todos sus servicios? Es cierto que el caso Huawei vino impuesto por las autoridades estadounidenses, pero no es menos cierto que la plataforma está fuera del control de Samsung, y no hubiera sobrado una consolidación mediante algún gesto de la misma.
Las dos ‘tallas’ del Note
La siguiente sorpresa no podemos calificarla como misterio, pero sí que ha sorprendido la creación de la familia Galaxy Note por parte de Samsung: se trata sin duda de una grata noticia, puesto que consolida el dispositivo de cara al futuro. Pero… ¿por qué estas dos medidas? Recordemos que el Galaxy Note 10 y el Note 10 Plus comparten componentes y estructura, salvo que el segundo es más grande, elevando la pantalla hasta las 6.8 pulgadas y contando el Note 10 Plus con un sistema de cámaras superior, al tiempo que más posibilidades de almacenamiento.
Podríamos especular sobre cuáles han sido los criterios elegidos por Samsung por diversificar esta gama, pero sospechamos que se trata de una forma de rivalizar de forma más directa con Apple y su creciente gama de iPhone. El mercado de la telefonía móvil se encuentra saturado y los fabricantes tienen que encontrar resquicios para convencer a los compradores de alta gama para volver a aflojar la cartera.
En definitiva, el Unpacked nos dejó un sabor agridulce, llenándonos el paladar con un excelente Galaxy Note 10, pero también con la extraña sensación de que la marca tiende a tapar con una manta aquello no que sale como hubiera esperado, una estrategia que llena de dudas a quien planea desembolsar más de $1,000 dólares por un terminal premium.