Una de las grandes aspiraciones que tienen las compañías de turismo espacial es asegurar la presencia humana en Marte. Anhelo que, por ahora, se ve muy difícil y distante.
Quienes están detrás de estas empresas saben que para lograr la colonización es necesario desarrollar tecnologías que posibiliten una independencia de la Tierra.
Elon Musk, director ejecutivo de Tesla y SpaceX, está consciente de esta necesidad. Según Fox Business, durante una reunión de accionistas de Tesla, uno de los asistentes le preguntó al magnate cuándo comenzaría a fabricar automóviles fuera de la Tierra.
“¿Una fábrica fuera del planeta? Me gusta su forma de pensar”, respondió Musk. El ejecutivo, de cualquier manera, señaló que era poco probable la instalación de una planta en Marte en un futuro cercano, aunque señaló que le gustaría “ver una antes de morir”.
“No sé lo que tendremos dentro de unos 40 años”, agrega Musk y afirma que si se lograra levantar una fábrica así en el planeta vecino antes de que él fallezca sería algo “genial”.
Parte de los planes que tiene Musk para colonizar Marte incluyen la construcción de una ciudad autosuficiente que sea capaz de alojar a un millón de habitantes para 2050.
Quienes sean los primeros en formar parte de esta colonia llegarían al planeta rojo en las naves Starship, el vehículo reutilizable de SpaceX.
Además de esta empresa y Blue Origin, de Jeff Bezos, en el último tiempo han aparecido otras compañías que promueven el turismo espacial. Una de las más destacadas es Virgin Galactic, de Richard Branson, que pretende llevar a cabo viajes suborbitales tripulados.