La noticia a principios de esta semana de que el Model 3 de Tesla se saltaría la fase de desarrollo «beta» (habitual en cualquier nuevo “producto tecnológico”) resultó una auténtica sorpresa para la industria, incluidos aquí sus fans más incondicionales. Sin haberlo aún probado, ni llevando un registro de incidencias, saltarse esta etapa parece algo asombroso y hasta arriesgado, incluso para “valientes” como Tesla.
Sucede que las expectativas son enormes. El Model 3 tendrá una autonomía 200 millas, se venderá a $35,000 dólares, y catapultará a Tesla a un volumen de producción mucho mayor y mucho más rentable. En otraas palabras, no se debieran aquí correr riesgos.
Esta mañana, el mismo CEO de Tesla, Elon Musk, hizo público un vídeo de 6 segundos en el que se puede ver un Model 3 acelerando por una calle suburbana. Hay muy poca luz, de lo que se deduce que las pruebas fueron hechas al anochecer o de madrugada, antes del amanecer. Todo sea por evitar a los espías…
First drive of a release candidate version of Model 3 pic.twitter.com/zcs6j1YRa4
— Elon Musk (@elonmusk) March 24, 2017
Parecerá demasiado poco y demasiado oscuro, pero es la primera toma “cuasi” oficial que tenemos del primer Model 3 y que podemos ver con nuestros propios ojos. Tampoco queremos caer en dramatismos, pero no es exagerado decir que estos seis segundos concentran buena parte del futuro de Tesla.
La compañía dijo este otoño pasado que tenía $365,000 dólares depositados a modos de reserva. Si cada una de estas reservas costaba $1,000 dólares, pues hay allí fuera 365,000 personas esperando ansiosas por su Model 3.
Los analistas dicen que el automóvil debe lanzarse pronto, y comenzar a entregarse sin problemas ni demoras, para así mantener el interés del público. El esfuerzo será enorme, y cualquier contratiempo deberá ser subsanado lo más rápido posible y sobre la marcha. 365,000 autos por entregar son muchos autos, incluso para un fabricante ya consolidado.
Quizá pensando en esto fue que en mayo del pasado año la compañía de California contrató al ex ejecutivo de Audi, Peter Hochholdinger, para encargarse de la producción de automóviles. Desde entonces, el lanzamiento de Tesla Model 3 es su único y exclusivo trabajo.
Los primeros Model 3 que salgan de la línea de producción no irán al público, sino a los miembros de la junta directiva de Tesla, a alguno de sus ejecutivos y también a algunos de sus empleados. Por ello, cualquier contratiempo que surja en un primer momento podrá quedar “en familia”, y repararse antes de que los grandes volúmenes del carro salgan al público general.
Los actuales propietarios de Tesla tendrán prioridad en la entrega, al igual que los compradores que vivan cerca de la planta de ensamblaje de la empresa en Fremont, California. También recibirán este beneficio aquellos que hayan ordenado las versiones más caras.