Las cámaras de tablero (“dash cam”) son un accesorio cada vez más popular entre los usuarios de vehículos, dado que el material audiovisual suele proporcionar útil evidencia en caso de un accidente o un altercado con otro conductor o algún peatón. Hay otros que, además, las usan buscando captar situaciones extraordinarias para luego compartir los videos en las redes sociales.
Equipados con la funcionalidad de asistencia a la conducción Autopilot, los modelos más recientes de Tesla incorporan ocho cámaras. Pese a reiteradas solicitudes, los conductores no han podido acceder a las grabaciones. Pero la limitación podría acercarse a su fin, a juzgar por lo anunciado por el cofundador y CEO de firma, Elon Musk.
Consultado sobre el particular recientemente a través de Twitter, el máximo ejecutivo de la compañía con sede en Palo Alto respondió: «Hay buenas noticias en ese sentido. El equipo de ingeniería de Tesla se puso manos a la obra y funcionalidad formará parte de V9 [la versión 9 de Autopilot]. De momento, está en las pruebas finales”.
Poco después, Musk aclaró que se había referido a una “versión beta”, la cual sería perfeccionada para la siguiente versión del asistente.
Los vehículos de Tesla tienen tres cámaras mirando hacia adelante, cada una de las cuales ofrece un campo de visión diferente. Dos más se encuentran en los pilares laterales, mientras que otro par mira hacia atrás desde la posición de los intermitentes laterales. La octava está fijada en la parte trasera.
Las cámaras incorporadas graban imágenes, según lo descubrió en 2016 un propietario identificado como Jason Hughes. Deseoso de averiguar cuántos datos almacenaban los Tesla tras un accidente, el programador tomó una unidad de visualización central que obtuvo de un Model S que había pasado a mejor vida. Allí, encontró que las cámaras habían guardado el registro en la unidad de control de medios cuando las bolsas de aire se desplegaron.
Material como ese se transforma luego en una herramienta esencial para los ingenieros del fabricante estadounidense, específicamente en el trabajo de determinar si un accidente fue atribuible a un error humano o un problema con las computadoras de a bordo. La compañía también evalúa los datos de los registros de la unidad de control central del vehículo para conocer su condición exacta en los momentos previos a una colisión.
El lanzamiento de Autopilot 9 es inminente, dado que originalmente estaba programado para agosto. La versión “beta” será inicialmente instalada en unidades de conductores especialmente seleccionados para su prueba y, unas semanas más tarde, será liberada para todos los propietarios.
Si bien la funcionalidad de “dash cam” será una ventaja comparativa para aquellos que aún no han invertido en una unidad independiente, el nuevo Autopilot también es muy esperado, ya que podría presente características de conducción autónoma todavía más avanzadas.