Decir que las cosas materiales brindan felicidad es una frivolidad de proporciones enormes, aunque tengo que admitir que cada vez que manejé el Lexus RC F, este dibujaba una sonrisa en mi cara. Desde que te acercas al auto, el diseño exterior es cautivante, su interior es seductor, sus sonidos son exuberantes sin dejar atrás su potencia, que es lo mejor de todo.
Tiene exactamente el mismo poder del Lexus GS F del cual hablamos hace unas semanas, un motor de ocho cilindros en forma de V, normalmente aspirado, que tiene una potencia de 467 caballos de fuerza, y también como el GS, el precio no es accesible para todos, solo para gente que goza de un flujo de efectivo considerable y es amante de la velocidad.
Sin ánimo de sonar repetitivo, también padece las mismas carencias que su hermano mayor el GS F, y al igual que todos los Lexus que hemos manejado, su sistema de “infotainment” es abismal. No comprendo como un auto que está en la categoría de lujo performance puede ofrecer tan poco en este rubro.
No tiene pantalla táctil, siguen insistiendo en el touch pad tipo laptop que es problemático de usar y poco amigable con el usuario estándar. Parece que se necesita un curso intensivo para poder entenderlo. En contraste, el sonido Mark Levinson es impecable, siendo el mejor que he escuchado en un auto. Se trata de una opción que no es barata pero que ayuda en gran manera a poner esa cara de alegría en tu rostro.
Como de costumbre, el diseño japonés exterior es impresionante, sus líneas son agresivas y lo cual lo hacen a leguas un auto deportivo desde donde se le observe. El color azul intenso que probamos hace honor a ese corte atlético del auto.
Los interiores a su vez no decepcionan: pieles y gamuzas adornan al interior y no dejan nada que desear. Lo tiene todo. Los asientos son de corte deportivo por lo que puede parecer poco cómodo para viajes largos, pero seguramente la potencia y el sonido nos harán olvidar la rigidez de las butacas.
La parte posterior no es muy amplia, pero eso lo sabías al ver que es un coupé. Es un auto para llevar dos personas sentadas, con suficiente espacio adelante y otras dos en la parte de atrás, pero con las rodillas pegadas al respaldo delantero. No es una sorpresa o queja, ya que es un auto de dos puertas, deportivo y es lo normal en este tipo de carros.
Los insertos de fibra de carbono en el techo y los alerones delanteros y traseros lo hacen aún más interesante. Esta es una opción extra, al igual que el sonido Mark Levinson. En total, el modelo manejado oscilaba los $82,000 dólares, algo que como lo dijimos al principio, es reservado para pocos.
Si eres amante de la potencia sin compromisos, este es tu auto: un performance de lujo que, aunque queda corto en tecnología de entretemiento, es sobrado en potencia, diseño y lujo interior. Como es costumbre, Android Auto y Apple CarPlay están ausentes en los modelos Lexus, aunque Toyota, la marca madre de Lexus, ya anunció que incorporara CarPlay en algunos modelos del 2019. Esperamos que Lexus haga lo mismo muy pronto.