Después de años de modelos conceptuales, Jeep finalmente regresará al segmento de las camionetas con un robusto modelo basado en el Wrangler de cuarta generación. Tentativamente llamado Scrambler, el modelo debutará en el Auto Show de Los Ángeles, y pondrá fin a casi tres décadas de ausencia del mercado de las pickups para el constructor estadounidense, que produjo la Comanche entre 1985 y 1992.
Si bien los detalles permanecen en secreto, una serie de filtraciones e imágenes de fotógrafos espías nos han dado una buena idea de lo que podemos esperar. A priori, el último integrante de la familia no parece que vaya a optar al puesto de líder de la manada en lo que a capacidad de carga o remolque se refiere.
Por lo visto, no se trata de un vehículo orientado al trabajo, sino más bien al estilo de vida al aire libre, quizá enfocado en aquellas personas que deseen una máquina para transportar sus juguetes hasta los parajes naturales. Sospechamos que su hábitat será un camino de tierra a varias millas de la carretera pavimentada más cercana, no un edificio en construcción. Para ese fin, vendrá exclusivamente con una cabina de dos filas de asientos y cuatro puertas, además de un único nivel de equipamiento, a diferencia de los principales actores en el rubro de las pickups medianas.
En el frontal, el Scrambler tomará prestados detalles como los faros redondos y la rejilla de siete ranuras de Jeep, heredados de la cuarta generación del Wrangler. Los fanáticos de la marca han publicado en el sitio web JL Wrangler Forums una representación que ilustra cómo podría verse el móvil.
Los disparos que los gráficos espías han realizado a los ejemplares camuflados confirman que la subsidiaria del grupo FCA ofrecerá el modelo con paneles de techo desmontables, una característica que podría hacer del Scrambler un ejemplar único en el mercado.
Fabricado entre 1981 y 1986, el Scrambler original –conocido como CJ-8- era tan refinado en su interior como un tractor John Deere de los años 70. Pero los tiempos cambiaron y Jeep no pudo salir adelante con el lanzamiento de un modelo tan básico en 2018, aunque sí con uno sofisticado y una batalla evidentemente más prolongada que la del modelo en el que se ha inspirado.
El Scrambler estará disponible con un sistema de infoentretenimiento Uconnect operable desde una pantalla táctil compatible con Android Auto y Apple CarPlay. Ofrecerá comodidades como aire acondicionado y asientos con calefacción.
De acuerdo a una diapositiva filtrada en foros, que fue atribuida a la presentación del concesionario, el modelo dispondría de ayudas electrónicas para la conducción, como el control de crucero adaptativo, un sistema de monitoreo de puntos ciegos y la tecnología de advertencia de colisión frontal, entre otras 15 funcionalidades únicas en el segmento.
Las opciones del motor podrían incluir un V6 de 3.6 litros de 285 caballos de fuerza (hp) y un cuatro cilindros de 2.0 litros de 270 caballos de fuerza (hp), con asistencia híbrida suave. Se especula también que Jeep agregaría más adelante a la producción de la gama una unidad equipada con motor diésel turboalimentado V6 de 3.0 litros.
Los bloques de seis cilindros estarán disponibles con una transmisión manual de seis velocidades, mientras que los de cuatro vendrían exclusivamente asociados a caja automática de ocho velocidades.
Después de su presentación en el salón californiano, el Jeep Scrambler comenzará a llegar a los salones de exhibición a principios de 2019. Los precios no se publicarán hasta unas pocas semanas antes de su fecha de venta, pero esperamos que se aproxime a los $35,000 dólares. Dicha cifra representaría un aumento de alrededor de 11 por ciento respecto del Wrangler de cuatro puertas, cuyo valor comienza en los $31,445 dólares en su versión más básica.
A simple vista, el Jeep Scrambler no tendrá ningún rival directo, dado que no existen en el mercado máquinas con tan alta inspiración todoterreno. En cualquier caso, será casi inevitable ubicarlo en el mismo segmento de camionetas medianas Chevrolet Colorado, GMC Canyon, Toyota Tacoma y la nueva Ford Ranger.
Introducida a comienzos de la década de los 80, la Comanche o MJ fue esencialmente una variante del SUV mediano Cherokee con una mayor distancia entre ejes. A partir de 1992, cedió su lugar en el portafolio de Jeep a la Dodge Dakota.