¿Qué ha pasado? Un laboratorio de investigación en Suecia, The Research Institutes of Sweden (RISE), construyó AstaZero, el primer campo de pruebas para vehículos conectados, y ahora ha dado más información sobre lo que está tratando de hacer.
El CEO, Peter Janevik, describió cómo cree que la instalación utilizará 6G y otras tecnologías de conectividad avanzadas para tener un impacto significativo en el despliegue de vehículos. Esto puede reducir drásticamente las muertes en carretera y proporcionar ayuda avanzada en caso de desastre durante las emergencias.
También ha destacado cómo podrían funcionar los escenarios. Esto incluye un dron que puede escanear el lugar de un accidente, creando un mapa de posibles obstáculos y peligros que se puede desplegar en tiempo real a los vehículos y permitir una gestión segura de situaciones futuras.
Esto es importante porque:
- Se prevé que el 6G sea una tecnología de latencia ultra baja y alta fiabilidad que facilitará una verdadera autonomía en vehículos y drones en una infraestructura sin fisuras.
- Esta tecnología podría ayudar a reducir los accidentes en áreas urbanas a través de respuestas más inteligentes de los vehículos.
- Estas tecnologías también podrían reducir la congestión y las emisiones, lo que significa que las ciudades pueden expandirse de una manera más respetuosa con el medio ambiente.
- Sin embargo, hasta que se pueda demostrar que la fiabilidad de la conexión tiene una eficacia superior al 99,999%, seguirán existiendo problemas de seguridad, de ahí la necesidad de un entorno de prueba.
- Instalaciones de todo el mundo han probado 5G para vehículos autónomos, pero este es el primero que permite a todas las marcas venir y pagar para usar las instalaciones para probar el despliegue de 6G, tecnología hiperconectada.
¿Cuáles son los riesgos? La instalación también permite a las marcas mitigar los riesgos a través de las pruebas, como garantizar la seguridad de la conexión para evitar que los piratas informáticos interrumpan la comunicación entre dispositivos. El seguimiento de drones en entornos urbanos también podría crear problemas de privacidad o vigilancia.
El despliegue de 6G requerirá una inversión masiva, por lo que es clave asegurarse de que se haga correctamente, de forma rentable y útil.
¿Qué sigue? La instalación se expandirá aún más a las pruebas impulsadas por IA, para permitirle comprender las situaciones contextualmente, así como una mayor comprensión de cómo funcionarán estos componentes en tiempos en que la conectividad se degrade. El lanzamiento de 6G está previsto para la próxima década, y será necesario crear marcos regulatorios para garantizar su uso seguro, especialmente en el ámbito de los vehículos conectados y los drones.