Esta semana supimos un poco más de los planes de electrificación de Nissan. Según un anuncio hecho por el fabricante, 2025 será el año en que comience a producir dos vehículos eléctricos en Estados Unidos para el consumo local. Uno de estos carros usaría la insignia de Nissan mientras que el otro sería un modelo de lujo vendido como un Infiniti. Ambos serán fabricados en la planta de ensamblaje de Nissan en Canton, Misisipi.
Un reporte de Car and Driver especula que, contrario a lo que podríamos suponer por la gran fiebre de compra de camionetas crossover y SUV que azota al planeta, estos vehículos eléctricos serían autos de pasajeros, lo que deja espacio a sedanes, coupés y hatchbacks. Car and Dirver se basa en unas breves y escuetas imágenes presentadas en el evento, y tendemos a estar de acuerdo.
Dichas imágenes muestran vehículos de siluetas bajas, lo que sugiere que serán sedanes o hatchbacks de cuatro puertas. El hecho de que ambos modelos eléctricos vayan a ser construidos en la misma planta de ensamblaje probablemente signifique que compartirán la misma plataforma, así como otros componentes mecánicos.
Car and Driver también especula, y nuevamente tendemos a estar de acuerdo, que el modelo Nissan quizá sea una versión de producción del IMS Concepts de 2019 y que el Infiniti estará basado en el hermoso sedán eléctrico conceptual QS Inspiration.
En el verano de 2019, en un evento en Nuevo México, Infiniti habló de su aproximación al tema de los autos eléctricos. Allí Infiniti habló de futuros “vehículos eléctricos a gasolina”, refiriéndose a autos eléctricos que contarían con un pequeño motor turboalimentado de tres cilindros y 1.5 litros de desplazamiento sin conexión a los ejes del vehículo, ya que funcionaría como un generador de electricidad para extender la autonomía y eliminar la necesidad carga.
Un año después, en junio de 2020, Peyman Kargar, presidente de Infiniti, confirmó en una entrevista con Automotive News los planes del fabricante de presentar al menos un vehículo eléctrico con esa tecnología. Aunque en la presentación no hubo mención de tal tema, esta posibilidad no ha sido descartada por el fabricante.
La transformación de la planta de ensamblaje de Canton tendrá un costo de $500 millones de dólares y será parte del programa Nissan Ambition 2030 que contempla inversiones de $18,000 millones de dólares a nivel global en los próximos cinco años y la presentación de 23 nuevos modelos eléctricos, 15 de ellos para Estados Unidos. Además, tiene la meta de que las ventas de Nissan a nivel global correspondan en un 40 por ciento a autos eléctricos para 2030.