Muchos de los que pasamos meses confinados y en soledad en nuestras casas producto de la pandemia, comprendimos la importancia de escuchar una voz humana en vivo y en directo. Por muy útiles que sean las herramientas telemáticas, siempre vamos a preferir una conversación cara a cara.
Con las vacas sucede lo mismo. Un estudio austríaco reveló que las reses también prefieren una charla en persona.
La investigación, publicada en Frontiers in Psychology, descubrió que las vacas se relajaban mucho más cuando un humano les hablaba directamente que cuando escuchaban una voz grabada a través de un altavoz.
“Al ganado le gusta que se les acaricie mientras se les habla suavemente”, asegura Annika Lange de la Universidad de Medicina Veterinaria de Viena, Austria. “En contextos científicos, una voz humana grabada hablando suavemente podría usarse para relajar a los animales, pero es difícil repetir las mismas frases y de la misma forma durante los experimentos”, agrega.
El equipo trabajó con una manada de 28 cabezas de ganado. Después de monitorear las respuestas de los animales durante los experimentos, encontraron que hablar en vivo mejoraba el estado de ánimo de sus amigos bovinos.
La variabilidad de la frecuencia cardíaca era mayor cuando se les hablaba, lo que indica que las vacas se estaban divirtiendo. Después del experimento, la frecuencia cardíaca bajó lo que demuestra que los animales se sintieron más relajados después de la charla en vivo.
“Cuando se relajan y disfrutan de la interacción, los animales a menudo estiran el cuello como cuando se acicalan unos a otros. Además, se cree que las posiciones de las orejas pueden indicar el estado de ánimo: las orejas colgantes o en posiciones bajas parecen estar relacionadas con la relajación”, añade la especialista.