Luego de que un tigre habitante del zoológico del Bronx diera positivo, muchos se preguntaron cuándo el coronavirus atacaría a los animales domésticos. Ese día llegó a finales de abril de 2020, cuando los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) informaron de dos gatos contagiados en Nueva York.
La autoridad sanitaria estadounidense aseveró que los felinos domésticos residían en hogares de áreas separadas del estado atlántico, que al cierre de esta nota acumulaba alrededor de un tercio de los más de 90,000 casos fatales en el país norteamericano.
De acuerdo con lo informado, las mascotas “padecían una enfermedad respiratoria leve», por lo que se esperaba que se recuperaran por completo”. Por lo mismo, los CDC no recomienda pruebas de rutina en animales.
En un comunicado, aclaró que si se confirmaba que otros animales son positivos para el SARS-CoV-2 en Estados Unidos, serían organismos como el Departamento de Agricultura (USDA) y los Laboratorios de Servicios Veterinarios Nacionales (NVSL) los encargados de adoptar las medidas correspondientes.
En los casos de Nueva York, uno de los gatos fue testeado por un veterinario tras manifestar una leve sintomatología respiratoria, no obstante ninguna de las personas que convivían con el felino estaba enferma de COVID-19.
“El virus puede haber sido transmitido a este gato por miembros del hogar levemente enfermos o asintomáticos o por contacto con una persona infectada fuera de su casa”, se explicó en un comunicado.
Por el contrario, el dueño de la segunda mascota sí dio positivo antes de que su gato mostrara signos. Un segundo animal en el hogar no ha mostrado signos de estar enfermo.
“Los funcionarios de la salud pública todavía están aprendiendo sobre el SARS-CoV-2, pero no hay evidencia de que las mascotas desempeñen un papel en la propagación del virus en Estados Unidos. Por lo tanto, no hay justificación para tomar medidas contra los animales de compañía que puedan comprometer su bienestar. Se necesitan más estudios para comprender si los diferentes animales, incluidas las mascotas, podrían verse afectados y de qué manera”, agregó la autoridad.
Los CDC entregaron las siguientes recomendaciones a los propietarios de mascotas:
- No permita que las mascotas interactúen con personas u otros animales fuera del hogar.
- Mantenga los gatos en el interior cuando sea posible para evitar que interactúen con otros animales o personas.
- Pasee a los perros con una correa, manteniendo al menos seis pies (dos metros) de distancia de otras personas y animales.
- Evite los parques para perros o los lugares públicos donde se reúne una gran cantidad de personas y perros.
- Si está enfermo con COVID-19 (lo sospecha o se ha confirmado por una prueba), restrinja el contacto con sus mascotas y otros animales, tal como lo haría con otras personas.
- Cuando sea posible, haga que otro miembro de su hogar cuide a sus mascotas mientras esté enfermo.
- Evite el contacto con su mascota, incluyendo caricias, acurrucarse, ser besado o lamido, y compartir comida o ropa de cama.
- Si debe cuidar a su mascota o estar cerca de animales mientras está enfermo, use una cubierta de tela para la cara y lávese las manos antes y después de interactuar con ellos.
Evidencia científica
Un análisis que expertos de Australia y Hong Kong divulgaron a mediados de mayo de 2020 en la revista Nature sugirió que los animales domésticos son susceptibles a la carga viral de sus amos.
Los científicos descubrieron que dos de 15 perros de hogares con casos confirmados de COVID-19 en Hong Kong estaban infectados.
El SARS-CoV-2 se detectó en un macho de la raza pomerania de 17 años tras practicarle cinco exámenes con hisopos nasales durante un período de 13 días. Otro pastor alemán macho de 2.5 años también fue diagnosticado a través de hisopos nasales y orales, señaló la publicación.
“Ambos perros tuvieron respuestas de anticuerpos detectadas usando ensayos de neutralización de reducción de placa. Las secuencias genéticas virales de los virus de los dos perros fueron idénticas al virus detectado en los respectivos casos humanos”, puntualizó.
A través de Nature, los expertos indicaron que los animales permanecieron asintomáticos durante todo el período de cuarentena.
“La evidencia sugiere que estos fueron casos de transmisión de SARS-CoV-2 de humano a animal. No está claro si los perros infectados pueden transmitir el virus a otros animales o de regreso a los humanos”, finalizó.
*Nota actualizada el 19 de mayo con estudio realizado por científicos de Australia y Hong Kong