Un grupo de investigadores australianos quería estudiar el comportamiento de las urracas. Para esto, instalaron unos dispositivos GPS de rastreo en las aves, similares a los arneses.
Sin embargo, los científicos pronto se dieron cuenta de que las urracas se ayudaban a quitarse dichos dispositivos entre ellas, lo que podría indicar un buen nivel de resolución de problemas en estas criaturas consideradas sociales e inteligentes.
Los ensayos buscaban aprender más sobre los patrones de movimiento y la dinámica social de esta especie. Los científicos también querían probar su novedoso invento, diseñado especialmente para que pudiera ser recuperado sin tener que volver a capturar al ejemplar.
El problema para ellos fue que las urracas no tuvieron problemas para encontrar el “punto débil” del instrumento en el sistema de sujeción magnética: luego de ayudarse mutuamente, lograron romperlo y quitárselo en poco tiempo.
De acuerdo con los profesionales, esta es la primera vez que se observa un comportamiento de este tipo en la especie, en la que uno de sus miembros ayuda a otro sin obtener una recompensa inmediata y tangible.
“Durante el estudio piloto, descubrimos lo rápido que se unen las urracas para resolver un problema. A los 10 minutos de colocar el último rastreador, atestiguamos cómo una hembra adulta sin el dispositivo trabajaba con su pico para intentar quitarle el arnés a un ejemplar más joven. A las pocas horas, la mayoría de los otros rastreadores habían sido retirados”, señala Dominique Potvin, autora del estudio.
Por último, el equipo a cargo de la investigación señaló que este tipo de comportamiento registrado demuestra “gran cooperación y un nivel moderado de resolución de problemas, proporcionando una prueba más de las potenciales capacidades cognitivas de esta especie”.