Debido a la pandemia de coronavirus en curso, estamos acostumbrados a usar mascarillas. Hemos visto algunos modelos sencillos y otros más sofisticados que utilizan la tecnología para mayor comodidad y protección de las personas.
En ese sentido, Biotlan acaba de presentar un singular dispositivo que se pone en el cuello, otorga una serie de protectores faciales magnéticos y un suministro personal de aire que pasa por un filtro HEPA y es esterilizado con rayos UV.
Se trata del Air-Ring, que se coloca alrededor del cuello y se sujeta con dos brazos que se elevan para enmarcar la cara.
En tanto, el aire se introduce por la parte trasera del dispositivo a través de un soplador mecánico, que lo aspira mediante un filtro de espuma y uno HEPA.
El aire es soplado directamente a la zona de la boca y la nariz libre de virus, patógenos y distintas partículas.
El aparato también cuenta con una serie de botones magnéticos cerca de las puntas de los brazos que permiten instalar y quitar una serie de protectores faciales transparentes, desde una pequeña máscara abierta para la nariz y la boca hasta una pantalla abierta de tamaño completo y una máscara sellada para la parte inferior de la cara.
Los encargados del Air-Ring explican que no es un dispositivo que sirve para protegerse del COVID-19, sino más bien se trata de un suministro personal de aire fresco y filtrado que llega a la cara del usuario durante todo el día.
El equipo detrás del invento menciona que, por ejemplo, quien lo use puede salir a hacer ejercicio en una ciudad muy contaminada.