Con una advertencia de «información falsa» tachó Instagram una publicación del presidente de Brasil, el ultraderechista Jair Bolsonaro, relativa a los efectos de la epidemia de coronavirus en su país, donde han muerto ya más de 11,600 personas.
Según informó el periódico Estadão, el mandatario compartió este lunes 11 de mayo información engañosa sobre el número de muertes por COVID-19 en el estado de Ceará, ubicado en el noreste del país sudamericano.
En rigor, el gobernante compartió una publicación del diputado estatal André Fernandes, en la que alegaba que las muertes por enfermedades respiratorias en Ceará habían disminuido en 2020 pese a la pandemia.
«¡Cada vida importa! Sin embargo, ¡hay algo muy ‘extraño’ en el aire!», escribió Bolsonaro en la red social, detallando que los decesos cayeron de 6,377 a 6,296 entre el 16 de marzo y el 10 de mayo.
Instagram eliminó la imagen de la cuenta del presidente después de que una agencia independiente demostrara que la publicación era una noticia falsa, informó el medio paulista.
“Según un control realizado por Agencia Lupa, indicado por la plataforma como justificación para el ocultamiento del contenido, las cifras citadas erróneamente incluyen muertes por otras enfermedades, como el cáncer y el sida. El Registro Civil señala que hubo 2,808 muertes por enfermedades respiratorias en el período citado en 2019 y 3,217 en 2020”, añadió Estadão.
A principios de marzo, Bolsonaro había protagonizado un hecho similar, pero en Twitter. En aquella ocasión, la plataforma eliminó videos de sus paseos por las calles de Brasilia, la capital de su país, contraviniendo todos los lineamientos de las autoridades sanitarias.
En aquella ocasión, el exmilitar interactuó con ciudadanos en espacios públicos en varios puntos de la ciudad. Mientras provocaba aglomeraciones de personas, el gobernante reiteraba el llamado a desobedecer los llamados para mantener el distanciamiento social.
Al cierre de esta nota, Brasil era el octavo país con más casos confirmados de COVID-19, con poco menos de 170,000, de acuerdo con el conteo de la Universidad Johns Hopkins, con lo cual superó a naciones como Irán, China e India.