Ha sido comentario obligado desde su estreno en Netflix en septiembre de 2020. Pero no solo los usuarios no quedaron indiferentes al documental The Social Dilemma. La inquietud parece haber alcanzado también a Facebook, una de las redes sociales más cuestionadas en la producción.
¿Los algoritmos de las redes sociales están diseñados para generar adicción entre sus usuarios? ¿Su estructura termina promoviendo el odio o la violencia étnica? Estas son algunas de las tesis que, en voz de importantes exejecutivos de las principales empresas de tecnología, aborda el documental.
Según la compañía de Mark Zuckerberg, el documental “esconde la sustancia en el sensacionalismo”, que ofrece una “visión distorsionada de cómo funcionan las plataformas de redes sociales” para crear un “chivo expiatorio” para los problemas de la sociedad.
«Los creadores de la película no incluyen ideas de quienes trabajan actualmente en las empresas o de cualquier experto que adopte una visión diferente de la narrativa presentada por la película. Tampoco reconocen, de manera crítica o no, los esfuerzos que han realizado las empresas para abordar muchos de los problemas que plantean. En cambio, se basan en los comentarios de aquellos que no han estado en el interior durante muchos años”, afirma Facebook.
Los dilemas de Facebook
En un documento publicado en su sitio web, Facebook se hacer cargo de los “puntos centrales” en los que el documental está equivocado, como la adicción, el funcionamiento de los algoritmos, la privacidad de datos y la desinformación.
La compañía argumentó que los algoritmos de la red social están diseñados para que los usuarios vean los contenidos más «relevantes y útiles», tal como lo hacen plataformas como Netflix, Amazon y Uber.
Facebook también negó que la plataforma esté motivada a aumentar la cantidad de tiempo que los usuarios le destinan, sino que «queremos asegurarnos de ofrecer valor a las personas». Al respecto, aseguró que en 2018 realizó cambios, que redujeron el uso en 50 millones de horas diarias.
Según la NBC, el argumento se contradice con las propias declaraciones de Facebook, que en sus informes financieros destaca los incrementos de la métrica de «usuarios activos diarios» (DAU).
Más de 1.79 mil millones de personas usan Facebook todos los días, según el informe de ganancias del segundo trimestre de 2020. Incluso, estimó que el ingreso promedio por usuario en el segundo trimestre de 2020 fue de $7.05 dólares.
Errores y falencias propias
De todos modos, Facebook reconoció errores cometidos en 2016, en referencia a la intromisión rusa en las elecciones presidenciales de Estados Unidos de ese año. Sin embargo, asegura que ha dado pasos para garantizar la integridad de los procesos.
También se hizo cargo de que promueve la desinformación, las noticias falsas o contenido que promueva el odio. “La idea de que permitimos que la información errónea infecte nuestra plataforma, o que de alguna manera nos beneficiamos de este contenido, es incorrecta», dijo Facebook.
Asegura que es la única red social de importancia con más de 70 socios de verificación de hechos, lo que le ha permitido eliminar más de 22 millones de discursos de odio. “Sabemos que nuestros sistemas no son perfectos y hay cosas que saltamos. Pero no nos quedamos de brazos cruzados y permitimos que se difunda información errónea o incitación al odio en Facebook”, puntualizó.