El gobierno de Rusia garantizó la distribución de al menos 130 millones de dosis de Sputnik V, su vacuna contra el coronavirus, para los países de América Latina.
El anuncio fue realizado por el director del Fondo Ruso de Inversión Directa (RFPI), Kiril Dmítriev, quien adelantó que al acuerdo con México el 11 de septiembre se sumarán otros dos compromisos en la región.
El 9 de septiembre, Rusia y México pactaron el suministro de 32 millones de dosis del medicamento.
Otro de los convenios será suscrito con uno de los principales estados de Brasil, que comprará 50 millones de dosis, adelantó Dmítriev, sin confirmar de cuál se trataría.
Uno sería el de Bahía, cuyos funcionarios anticiparon un acuerdo para testear la vacuna. Según la agencia rusa Sputnik, el convenio contempla acceso a datos científicos, pero no al desarrollo de estudios clínicos en voluntarios.
Bahía sería el segundo estado brasileño en testear la vacuna, después de Paraná, donde se prevé inmunizar a 10,000 voluntarios a partir de octubre. En 2021, comenzaría la producción a gran escala en este territorio.
Los convenios de Rusia llegan en momentos en que la farmacéutica AstraZeneca y la Universidad de Oxford paralizaron los ensayos en humanos, luego de que uno de los voluntarios sufriera una reacción adversa considerada grave. De todos modos, la compañía garantizó que el antídoto llegará en 2020.
Rusia registró oficialmente su vacuna Sputnik V el 11 de agosto. Según los responsables, demostró inmunogenicidad estable y brinda inmunidad de hasta dos años.
Producción en el exterior
Dmítriev aseguró que el RFPI prevé producir en el extranjero cerca de 200 millones de dosis en lo que resta de 2020, y otras 500 millones en 2021.
El funcionario ruso aseguró que el organismo está dispuesto a firmar acuerdos, siempre teniendo presente las capacidades de producción disponibles.
En México, la vacuna será producida por la farmacéutica Landsteiner Scientific. Las primeras entregas están previstas para noviembre de 2020.