Las noticias falsas que se viralizan sobre el coronavirus pueden aumentar la sensación de pánico en torno a la pandemia.
Por esta razón, el gobierno de Malasia ha endurecido su postura respecto a esta reprochable tendencia.
Quizá al extremo, porque ha anunciado penas de cárcel para quienes difundan fake news sobre la crisis sanitaria mundial.
Así, cualquier persona procesada por propagar noticias falsas se enfrenta a una multa máxima de 100 mil ringgit (unos $24,000 dólares), además de tres años de prisión.
De acuerdo con el diario indonesio Jakarta Post, la ordenanza tipifica como delito a quien “cree, ofrezca, publique, imprima, distribuya, haga circular o difunda cualquier noticia falsa” que provoque temor en el público.
Esta nueva norma ha sido redactada bajo un decreto de emergencia, por lo que no pude ser impugnada por el Parlamento, el que también se encuentra suspendido por el momento.
La medida adoptada por las autoridades malasias ha sido duramente criticada por los grupos de oposición, incluso por funcionarios al interior del propio Gobierno.
Por su parte, las organizaciones de derechos humanos también han expresado su descontento y preocupación, ya que advierten que la ordenanza puede provocar la ocurrencia de nuevos abusos.
También se detienen en la ambigüedad de la medida, ya que las noticias falsas no se definen en ningún sentido significativo.
Malasia tiene una población de 32 millones de habitantes. Desde que se decretó la emergencia, ha registrado 319 mil casos de contagiados por COVID-19, mientras que 1,200 personas han perdido la vida a raíz del virus SARS-CoV-2.