Estados Unidos podría prescindir de la vacuna de Oxford y AstraZeneca contra el COVID-19, incluso si el antídoto obtiene la aprobación por parte de los organismos regulatorios.
Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas y principal asesor médico de la Casa Blanca, afirmó que Estados Unidos cuenta con suficientes contratos con otros fabricantes para vacunar a toda su población.
“Mi sensación general es que, dadas las relaciones contractuales que tenemos con varias empresas, tenemos suficientes vacunas para satisfacer todas nuestras necesidades, sin necesitar a AstraZeneca”, afirmó el especialista a la agencia Reuters.
Estados Unidos mantiene contratos para la aplicación de las vacuna desarrolladas por los laboratorios de Pfizer/BioNTech, Johnson & Johnson y Moderna, además de Novavax, que todavía no ha sido aprobada.
“Si se observa el número [de dosis] que vamos a recibir, la cantidad que podemos obtener de J&J, Novavax, Moderna… si contratamos más, es probable que podamos manejar el impulso que necesitamos, pero no puedo decirlo con certeza”, añadió Fauci.
Aunque desde antes de su aprobación la vacuna de Oxford y AstraZeneca fue sometida a una serie de cuestionamientos, las críticas se intensificaron en marzo de 2021, cuando una decena de países europeos suspendió su aplicación tras vincularla con casos de coágulos sanguíneos.
Después de que el laboratorio asegurara que los estudios fase 3 en Estados Unidos habían demostrado una eficacia de 79 por ciento, una agencia de salud del país dijo que la compañía presentó datos desactualizados y que ofrecían una imagen incompleta de su eficacia. AstraZeneca se vio obligada a publicar un nuevo informe que mostró una eficacia de 76 por ciento.