Con más de 10 millones de contagiados y 500,000 fallecimientos, los padecimientos producto de la infección por el nuevo coronavirus parecen no terminar una vez que los pacientes reciben el alta.
Así lo han planteado expertos británicos reunidos en el Grupo de Trabajo de Respuesta a Traumas del Covid, que lidera el University College de Londres.
Citados por BBC News, los médicos señalaron que quienes estuvieron internados de gravedad deben someterse a un examen para detectar el trastorno de estrés postraumático (TEPT).
Los expertos añadieron que los controles regulares a la salud psíquica de las personas que pasaron por una unidad de cuidados intensivos (UCI) deberían durar al menos un año.
Citando estudios sobre brotes de enfermedades infecciosas en el pasado, el grupo alertó que 30 por ciento de los pacientes desarrollaron TEPT, además de cuadros de depresión y ansiedad.
Tracy fue una de las 100,000 personas que fueron atendidas en los sistemas sanitarios del Reino Unido, donde los contagiados superaron los 300,000, con más de 43,000 casos fatales, según el conteo de la Universidad Johns Hopkins.
Durante marzo, la mujer de 59 años estuvo internada en el Hospital Whittington, ubicado al norte de Londres. La experiencia de esas tres semanas, una de las cuales fue en la UCI, le bastó para reconocer efectos psicológicos.
«Fue como estar en el infierno. Vi gente muriendo, personas cuya vida se diluía. El personal usaba máscaras y todo lo que veías eran ojos. Era tan solitario y aterrador», confesó a BBC News.
Desde que fue dada de alta, Tracy sigue la idea de que morirá perturba su descanso, por lo que está recibiendo asesoría experta.
«Ha sido realmente difícil. Físicamente he estado muy cansada. Estoy empezando a recuperarme, pero el aspecto mental es muy difícil de manejar», contó.