Investigadores de la Universidad del Sur de Florida desarrollaron una técnica que permite desinfectar de manera rápida las mascarillas N95 y recargar los filtros.
De acuerdo con los científicos, este sistema podría ayudar a reducir los problemas de escasez y contaminación asociados a su uso masivo.
Con esta técnica se podría restablecer 95 por ciento de la eficiencia de filtración original de la N95, incluso luego de 15 ciclos de tratamiento.
¿Cómo funciona?
De acuerdo con el artículo publicado en el sitio de la USF, la técnica se apoya en un fenómeno causado por la ionización del aire circundante a los conductores eléctricos para esterilizar las mascarillas que protegen del COVID-19 y otras enfermedades que se transmiten por el aire.
“El tratamiento de descarga de corona en las máscaras N95 puede matar 99.99 por ciento de las bacterias después de tres ciclos al utilizar un cable como electrodo”, señala la investigación.
Al mismo tiempo, los investigadores explican que las ventajas de esta técnica son que no necesita calentamiento adicional, no usa químicos, no implica contacto y es reutilizable.
La utilización de esta técnica para alargar la vida útil de un mascarilla también generaría un impacto positivo en el medioambiente.
“Si 10 por ciento de la población de todo el mundo aprovechara la tecnología de reutilización de mascarillas, habría entre 4,000 y 5,000 millones de mascarillas menos desechadas en el medio ambiente”.
Los investigadores ya trabajan con una empresa de diseño de dispositivos médicos para convertir sus prototipos en productos que se puedan usar en los hospitales y por el público en general.