- Pantalla con tasa de actualización de 90 Hz
- Precio accesible
- Capacidad de almacenamiento suficiente
- Botones distribuidos en un mismo costado
Motorola quiere dar un paso adelante ahora que celebra las 10 generaciones de la serie Moto G, y lo quiere hacer con dispositivos de diferentes rangos de precio sin que el usuario pierda características interesantes por elegir uno de bajo costo. El ejemplo perfecto es el Moto G30, un smartphone con especificaciones relevantes y precio accesible. Después de unas semanas con él, contamos nuestra experiencia.
Empecemos por el aspecto que realmente destaca desde que se enciende la unidad por primera vez: la pantalla. La firma de Chicago puso un display que cuenta con resolución HD+, tamaño de 6.5 pulgadas y relación de aspecto de 20:9, además de una frecuencia de barrido vertical de 90 Hz (se debe activar en la configuración general), lo que significa que actualiza su imagen unas 90 veces en un segundo.
Sí, un panel “normal” hasta cierto punto. Sin embargo, los colores y el nivel de contraste parecen haber sido mejorados para ofrecer una buena experiencia multimedia al reproducir series en Netflix o videos en YouTube.
Celulares anteriores de la misma familia Moto G nos dejaron con un sabor semiamargo, en especial porque su pantalla tenía algunos puntos flacos, sobre todo en la reproducción de contenido o visualización de imágenes.
En este sentido, sí se siente que hay una evolución en el G30, por lo menos desde el momento en que se enciende y empieza a mostrar clips o fotografías, de nuevo, sin que eso conlleve a pagar una gran suma de dinero.
Diseño
Como otros de sus hermanos, el Moto G30 cuenta con un módulo óptico que resalta unos milímetros de su espalda, donde también se puede encontrar el sensor de huellas para desbloquear la unidad. Por cierto, la cámara trasera se compone de tres lentes —el principal de 64 megapixeles—, así como de un sensor de profundidad.
En el costado derecho del smartphone, la marca decidió poner todos los botones: el que activa al Asistente de Google, los de volumen y el de encendido. Puede que en un principio el usuario presione el de la inteligencia virtual de la californiana en lugar de aquel que permite prender el móvil.
En más de su diseño, el Moto G30 integra el jack para audífonos alámbricos (en la parte superior), el puerto de carga USB-C y el canal de audio (no hay sonido estéreo).
El teléfono se siente bien en las manos, es fácil de manipular. También ayuda a tener una buena experiencia de agarre el hecho de que el fabricante incluye en el paquete de compra una funda.
Desempeño, autonomía y funcionamiento en general
En su interior, el Moto G30 incorpora una memoria RAM de 4 GB y el procesador Snapdragon 662, la misma configuración que ya se vio, por ejemplo, en el Nokia 5.4. Con estos elementos, se puede esperar una buena respuesta en la ejecución de cualquier tipo de aplicación de productividad y entretenimiento.
Respecto a su almacenamiento, viene con 128 GB, suficientes para guardar apps, videos y fotografías. Su batería es de 5,000 mAh, lo que significa olvidarse de los cables en por lo menos dos días.
Lo que sí es que parece que Motorola ya puso la carga rápida de 20 watts como un estándar para sus nuevos móviles de la serie Moto G. No es de las peores propuestas en el mercado, pero tal vez sí necesita avanzar más en este aspecto. Con el propósito de tener una idea más clara, se requieren alrededor de 140 minutos para que el nivel de pila del Moto G30 pase de 15 a 100 por ciento.
En relación a la interfaz de usuario, llama la atención que la firma logra tener una experiencia de Android puro —Android 11— sin que eso signifique sacrificar su toque con My UX, que permite intervenir o personalizar el teléfono, según el estilo de cada usuario.
De manera general, se tiene una buena navegación por las distintas pantallas del móvil y es fácil acceder a la configuración para hacer los ajustes necesarios.
Conclusiones
El Moto G30 gusta por su precio, alrededor de $5,000 pesos mexicanos o $250 dólares, pantalla, autonomía y respuesta. También se puede decir que le cae muy bien el sistema operativo Android 11 para ofrecer una mejor experiencia de usuario.
Aquí sí se cumple el hecho de que cada peso o dólar está justificado en los componentes e implementación de Motorola, por lo que el móvil es una de las primeras opciones de ingreso a la gama media que recomendaríamos.