La batería de 129MWh, que será emparejada con un parque eólico, está diseñada para mejorar la seguridad de los suministros de electricidad en todo el sur de Australia. El CEO de Tesla, Elon Musk, no pudo dejar de mencionarlo en su cuenta de Twitter, con el estilo que lo caracteriza.
This will be the highest power battery system in the world by a factor of 3. Australia rocks!! https://t.co/c1DD7xtC90
— Elon Musk (@elonmusk) July 7, 2017
Musk viajó a Australia para hacer el anuncio en persona, diciendo que la batería será «tres veces más poderosa que cualquier otra cosa en la tierra”, según informa Cnet .
«El mundo la verá como un ejemplo de una aplicación de batería a gran escala para la red que realmente tendrá una gran cantidad de carga», dijo Musk en la conferencia de prensa que se llevó a cabo para anunciar oficialmente el proyecto. «Este es definitivamente el camino al futuro, y creo que otros estados estarán examinando esto más de cerca y ver si es aplicable a sus necesidades. Y sospecho que en la mayoría de los casos, sí lo es».
Por su parte, el primer ministro de Australia del Sur, Jay Weatherill, también anunció esta noticia en diferentes plataformas de redes sociales antes de la conferencia de prensa de Musk, quien se mostró optimista, diciendo que el proyecto de infraestructura pondría a Australia del Sur «a la vanguardia de la tecnología mundial de almacenamiento de energía». Interesantemente, cambió su fotografía de perfil para publicar una en la que se encuentra junto a Musk.
World’s largest lithium ion battery will be installed in #SouthAustralia under a historic agreement between #Neoen #Tesla & SA Gov! pic.twitter.com/GcfrwOzD9g
— Jay Weatherill (@JayWeatherill) July 7, 2017
Weatherill confirmó el acuerdo, que forma parte clave del plan energético de 550 millones de dólares del gobierno, y dijo que Musk había confirmado su promesa hecha en Twitter en marzo de que podría entregar la batería dentro de los 100 días de la firma del contrato o sería entregada gratis.
Musk dijo a periodistas en Adelaida que el proyecto no carecía de retos técnicos, dado que sería la mayor instalación de baterías en el mundo «por un margen significativo», pero aunque aceptó que existe algún riesgo en un proyecto de esta magnitud, concluyó diciendo: «Tenemos confianza en nuestras técnicas y en el diseño del sistema».
