Momificar animales y enterrarlos como ofrendas votivas a los dioses era una práctica común entre los habitantes del Antiguo Egipto. Los arqueólogos estiman que existen aún 70 millones de momias de animales bajo el territorio en que habitó la ancestral civilización.
Los expertos de la Universidad de Leicester escogieron tres —un gato, un pájaro y una serpiente— para realizarles una autopsia 2,000 años después de su muerte, informó la página web de esa institución.
Estos restos momificados fueron sometieron a un escáner micro-CT de alta resolución. Además, los investigadores reconstruyeron sus esqueletos y tejidos usando impresión 3D.
Gracias a esas pruebas, pudieron conocer las técnicas de momificación, cómo vivieron y murieron estos animales y a qué manipulación fueron sometidos por parte de los humanos, de acuerdo con un estudio publicado en la revista Scientific Reports.
“Los avances en la tecnología de imágenes están, por primera vez, revelando nuevos conocimientos sobre la vida de estos animales y las prácticas de momificación, sin alterar las envolturas. Hemos podido visualizar huesos y dientes, e incluso tejidos blandos disecados con nuevos niveles de detalle. Los escaneos han hecho posible imprimir en 3D y manipular los restos esqueléticos y realizar un recorrido virtual, revelando el impacto de la momificación en los propios animales”, señaló Richard Thomas, profesor de arqueología en la Universidad de Leicester.
Dentro de las conclusiones del equipo, en el que también participó la Universidad de Swansea, se destaca que el gato tenía menos de cinco meses. Esto por los dientes que aún estaban sin erupcionar y que permanecían escondidos dentro del hueso de la mandíbula. Además, la separación de vértebras indicó que posiblemente el felino había sido estrangulado.
Con respecto a la serpiente, fue identificada como una cobra egipcia juvenil (Naja haje). Presentaba evidencia de daño renal, que puede explicarse por haber estado privada de agua. El análisis de las fracturas óseas de la serpiente, muestra que finalmente fue asesinada por un latigazo. Luego, durante la momificación, fue sometida a un procedimiento de “apertura de boca”. Eso demostraría la primera evidencia de un comportamiento ritual complejo aplicado a una serpiente.
Aunque existen otros métodos para escanear artefactos antiguos sin dañarlos, estos tienen limitaciones: los rayos X estándar brindan imágenes bidimensionales y las tomografías computarizadas médicas entregan imágenes en 3D, pero la resolución suele ser baja.
El escáner micro-CT, por el contrario, ofrece a los investigadores imágenes en 3D de alta resolución.