El Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó este martes 20 de octubre una demanda contra Google por “mantener un monopolio ilegal» en el mercado de las búsquedas y la publicidad en internet.
La demanda acusa a la compañía de Alphabet Inc. de violar la legislación vigente por la forma en la que se relación con sus rivales en los negocios de la búsqueda y la publicidad.
Según los cargos, la compañía habría puesto en desventaja a sus rivales para mantener la posición dominante de su propio motor de búsqueda y usar este poder para vender más anuncios.
Se trata de la acción “más agresiva del Gobierno al poder de mercado de una empresa de tecnología en más de dos décadas”, afirmó The Wall Street Journal, con el «potencial de sacudir más allá de Silicon Valley».
La demanda solo es comparable con la presentada en 1998 contra Microsoft Corp y al caso de 1974 contra AT&T, que llevó a la ruptura de Bell System, consignó la agencia Reuters.
La demanda se produce más de un año después de que el Departamento de Justicia y la Comisión Federal de Comercio iniciaran investigaciones antimonopolio en cuatro grandes empresas de tecnología: Amazon, Apple, Facebook y Google.
A la acción judicial se sumaron 11 estados –todos con fiscales generales republicanos, al igual que el presidente Donald Trump- , pero es posible que próximamente lleguen otras demandas.
Los fiscales generales estatales están llevando a cabo investigaciones sobre otros negocios de la compañía, así como una investigación más amplia sobre la publicidad digital contra esta firma y Facebook.
Los cargos contra Google
The Wall Street Journal había adelantado que el Departamento de Justicia alegaría que Google, una unidad de Alphabet Inc., mantiene su estatus “de guardián de internet” a través de una “red ilegal” de acuerdos comerciales “excluyentes y entrelazados” que marginan a competidores
Además, que Google utiliza “miles de millones de dólares” que recauda a través de los anuncios en su plataforma para pagar a los fabricantes, operadores y navegadores de teléfonos móviles, como Safari de Apple, para “mantener a Google como su motor de búsqueda predeterminado”.
El resultado es que la compañía tiene la primera posición en búsquedas en cientos de millones de dispositivos estadounidenses, con pocas oportunidades para que cualquier competidor logre avances, según los cargos del gobierno de Estados Unidos.
Según la denuncia, Google administra casi el 90 por ciento de todas las consultas de motores de búsqueda generales en Estados Unidos y casi el 95 por ciento de las búsquedas en dispositivos móviles.
«Sin una orden judicial, Google continuará ejecutando su estrategia anticompetitiva, paralizando el proceso competitivo, reduciendo las opciones de los consumidores y sofocando la innovación”, dice la demanda presentada por el fiscal general Bill Barr.
Google: Demanda «profundamente defectuosa»
En tanto, Google calificó la demanda como «profundamente defectuosa», según recogió la agencia Reuters.
Agregó que la gente «usa Google porque así lo desea, no porque se vea obligada a hacerlo o porque no pueda encontrar alternativas».
En 2013, la Comisión Federal de Comercio (FTC) alcanzó un acuerdo con Google, en el marco de una investigación antimonopolio por un supuesto sesgo en su función de búsqueda para favorecer sus productos.
* Actualizada con detalles de la demanda y reacción de Google