Realizar un viaje al espacio —y volver a la Tierra— requiere de un importante consumo de combustible.
Esto se ha convertido en uno de los grandes desafíos para las distintas misiones, porque llevar más combustible significa cargar con más peso, lo que siempre termina por convertirse en un obstáculo.
Sin embargo, una empresa emergente tiene un proyecto innovador que podría resolver el problema del combustible en las misiones espaciales.
La compañía Orbit Fab anunció sus planes de desarrollar una suerte de gasolinera espacial. Para esto, la empresa se asoció con SpaceX, por lo que esta estación podría ser enviada fuera de la Tierra a finales de 2022 o comienzos de 2023.
La firma explica que el objetivo es dejar a Tanker-002, nombre que recibe el invento, en la órbita geoestacionara de la Tierra. Ahí es donde la mayoría de sus clientes están interesados, según explican desde la compañía.
Entre los posibles usuarios destacan el Departamento de Defensa de Estados Unidos y otros servicios de inteligencia.
En julio, Orbit Fab realizó su primer lanzamiento de prueba al enviar al espacio el primero de estos módulos.
Esta primera versión tiene un peso de 45 kilogramos y se espera que el Tanker-002 suba casi a los 100 k.
Los depósitos de esta estación estarán cargados de hidracina, que es un tipo de combustible que se utiliza para algunos cohetes y naves espaciales.
Desde la compañía también explicaron que la idea es ubicar estos módulos a unos cientos de kilómetros del cinturón geostacionario para no “abarrotar la órbita”.
Así, cuando uno de los clientes necesite combustible, la gasolinera se moverá para situarse en la misma órbita y encontrarse con el cliente para que pueda cargar el combustible.