La agencia espacial estadounidense difundió este viernes un video en el que el explorador Curiosity registra un inmenso remolino de arena en la superficie marciana, un fenómeno que también se conoce como “diablo de polvo”.
Como informa la NASA en un comunicado, el diablo de polvo se hace patente en el centro de la imagen, en el límite entre las pendientes más oscuras y más claras, moviéndose de izquierda a derecha.
Eso se puede apreciar en un GIF animado que difundió la agencia. “El GIF animado muestra una película del diablo de polvo que tomamos con Navcam en Sol 2847, que cubre un período de aproximadamente cinco minutos. A menudo tenemos que procesar estas imágenes, mejorando lo que ha cambiado entre ellas, antes de que aparezcan claramente los remolinos de polvo. Pero este diablo de polvo era tan impresionante que, si miras de cerca, puedes verlo moviéndose, incluso en las imágenes sin procesar”, destaca el documento oficial.
The devil's in the details. If you look closely, you can see a dust devil moving across the surface of Mars. I keep an eye out for these in an effort to understand more about weather on the Red Planet. https://t.co/rx1vZ0n36q pic.twitter.com/8zpCJcgRzK
— Curiosity Rover (@MarsCuriosity) August 27, 2020
De acuerdo con los expertos, este fenómeno, común en Marte, es uno de los mayores peligros para las misiones que operan en el planeta rojo. Y puede ser una gran dificultad para las aspiraciones de construir una colonia humana.
Aunque no son muy rápidos, su velocidad se calcula entre los 30 y los 50 kilómetros por hora, tienen la capacidad de levantar polvo hacia la atmósfera marciana y cambiar su comportamiento.
“Un calentamiento de la superficie más fuerte tiende a producir una convección y vórtices convectivos más fuertes, que consisten en vientos rápidos que azotan los núcleos de baja presión. Si esos vórtices son lo suficientemente fuertes, pueden levantar polvo de la superficie y volverse visibles como remolinos de polvo, que Curiosity puede filmar con sus cámaras”, destaca la agencia Europa Press.
De acuerdo con la NASA, el rover exploraba una de las laderas del Monte Sharp en el centro del cráter Gale, cuando se apreció el paso del fenómeno que es característico en el clima marciano.