El FBI pagó aproximadamente un millón de dólares para desbloquear el iPhone del tirador de San Bernardino.
En concreto, la Oficina Federal de Investigación de los Estados Unidos pagó 900,000 dólares para acceder al iPhone del autor del tiroteo de San Bernardino, dijo la senadora Dianne Feinstein (D) esta semana.
«Estaba muy impresionada cuando sucedió lo de San Bernardino y ustedes hicieron propuestas para permitir que ese dispositivo se abriera, y entonces el FBI tuvo que gastar $ 900,000 para abrirlo», dijo Feinstein. «Y como posteriormente supe, había buenas razones para entrar en ese dispositivo», añade.
En 2016, el FBI contrató a una empresa de seguridad para desbloquear el iPhone 5C protegido con contraseña del autor del tiroteo en San Bernardino, Syed Rizwan Farook, quien junto con su esposa mató a 14 personas en un ataque en diciembre de 2015.
Pero, entonces, la agencia se negó a revelar cuánto pagó por ello. El director del FBI, James Comey, insinuó que el año pasado el equipo del FBI había indicado que la agencia pagó «más dinero de lo que ganaría en sus siete años restantes de trabajo» o, aproximadamente, menos de $ 1.3 millones de dólares.
El año pasado, Apple desafió la orden de un juez de ayudar al FBI en su investigación sobre el tirador de San Bernardino, argumentando que eso supondría construir una puerta trasera en el sistema operativo del iPhone bloqueado, amenazando así la privacidad de sus clientes.
Después, el FBI dejó el caso después de que obtuvo acceso al iPhone. La agencia declaró más adelante que no encontró ninguna evidencia de que Farook coordinara el ataque con los miembros de organizaciones terroristas, pero aún así sostuvo que la información era «útil».
Defensores de la privacidad y expertos en tecnología argumentan que el FBI debe revelar su método a Apple para que pueda reparar cualquier error en su sistema operativo.
Las vulnerabilidades descubiertas por las agencias federales suelen ser reportadas al Proceso de Equidad de Vulnerabilidades, un paso que la agencia se ha negado dar hasta ahora.
La divulgación de esta información podría dificultar los esfuerzos de descifrado de los investigadores, sostiene el FBI.
Comey dijo que, aproximadamente, el 12% de los dispositivos de consumo eran inaccesibles para los investigadores del FBI, y que el cifrado haría que ese número creciera. «Estamos encontrando cada vez más dispositivos… que no podemos abrir», dijo en un discurso en la Conferencia de la Industria de Operaciones Especiales en mayo de 2016.
En respuesta a la controversia, el senador Feinstein y el senador Richard Burr (R), redactaron un proyecto de ley de cifrado en abril que obligaría a las empresas a cumplir con las demandas del Gobierno para el acceso a servicios cifrados.